Las lágrimas de Rafa Nadal en Málaga reflejaron un sentimiento que se extendió entre todos los aficionados al tenis. Durante más de dos décadas llevó no solo al tenis, sino al deporte español a lo más alto. Sin embargo, como todas las cosas, hay que escribir el punto y final. Aunque ganar la Copa Davis hubiera sido la mejor de las despedidas, no pudo ser. El equipo de David Ferrer cayó eliminado en la primera ronda de la Final a 8 ante Países Bajos tras las derrotas de Nadal y de la dupla Alcaraz-Granollers en dobles.
Oficialmente, desde el martes 19 de noviembre de 2024, Rafa Nadal pasó de ser un deportista en activo a un jubilado. El resto de los mortales cuando dejan de ser población activa comienzan a recibir una pensión, ya sea privada o pública, pero ¿qué ocurre con los atletas de élite? En el caso del tenis, los jugadores profesionales cuentan con su propio Plan de Ahorro-Jubilación.
Bajo el nombre Plan de Jubilación de Jugadores de la ATP, el circuito pretende proporcionar a los que hayan sido jugadores en él un apoyo financiero tras su retirada. Esta iniciativa comenzó a aplicarse formalmente desde 1990 y les ofrece una prestación, durante 20 años, a partir de los 50 años. Es decir, que Rafa Nadal deberá esperar 12 años más para poder beneficiarse de esa ayuda.
Jaime Fillol, un influyente jugador chileno, fue una de las figuras clave, a finales de la década de 1980, para la elaboración del programa. Los recursos económicos para realizar la contribución al plan de jubilación se obtienen de los ingresos que generan los torneos y los propios jugadores, así como de los premios en metálico y los derechos televisivos o licencias de torneos.
Qué requisitos deben de cumplir los tenistas
Por la ATP pasan tantos tenistas como estilos de juego, no obstante, no todos tienen la oportunidad de acogerse a esta ayuda. Hasta la fecha, deben formar parte de la élite del tenis profesional durante cinco años. Tendrán que figurar entre los 125 mejores en individuales y entre los 40 mejores en dobles. Además, en 2018 se creó un plan alternativo para aquellos que contribuyeran durante un periodo de tres años.
Cada año, cierto número de jugadores (el último fueron 300) son elegibles para un año de crédito basado en la participación de torneos ATP. Cada jugador elegible para el plan tiene una cuenta personal y un acceso web donde pueden ver su información del plan.
En el año 2023, el fondo contaba con una aportación de 18,7 millones de dólares ese año. De ese dinero, la ATP destina la misma cantidad de dinero para la presión de los 165 jugadores que cumplen los requisitos. Actualmente, 878 tenistas reciben la ayuda económica. En total, había 270 millones de dólares en la cuenta de la Asociación de Tenistas Profesionales.
El pasado año, los profesionales que cumplieron los criterios de elegibilidad la temporada pasada recibieron 113.600 dólares. Aprovechando el éxito, en 2024 el plan se expandirá a 300 jugadores con derecho a beneficiarse de él. En total, serán 150 tenistas de individuales, 50 de dobles y 100 deportistas que compitan en torneos Challenger, estos últimos tendrán una contribución parcial.