Llegó el día. El momento que el mundo del tenis estaba esperando: la Copa Davis. Será en este torneo donde Rafa Nadal ponga el punto y final a su carrera. Un hecho que ha disparado las cotas de interés de los aficionados y ha generado una gran expectación en torno a la competición que se disputará en Málaga. La leyenda del tenis español colgará la raqueta en ese torneo que le vio brillar por primera vez hace 20 años. Las dudas sobre si jugaría finalmente o no comenzaron a elevarse a medida que se acercaba la cita y no ha sido hasta este mismo martes cuando se ha confirmado que será el encargado de abrir la ronda ante Países Bajos y lo hará ante Botic Van de Zandschulp.
En las últimas horas, la expectación en torno al neerlandés se ha disparado. El tenista neerlandés se encuentra en el puesto 80 del ranking de la ATP a pesar de que hace tres años que irrumpió en el Top 100 en el año 2021, cuando alcanzó los cuartos de final del US Open. Es cierto que consiguió alcanzar el puesto 22 del mundo, aunque no fue capaz de mantenerse en esas esferas de la tabla debido a las continuas lesiones en el tobillo que lastraron su ascenso.
Tal fue la situación que incluso se llegó a plantear dejar el circuito, dado que ya no era capaz de disfrutar en los partidos y se encontraba una dinámica de días malos de la que no era capaz de salir. Finalmente, se sobrepuso a la situación y afrontó el momento que le estaba tocando vivir. Ahora tiene un objetivo en mente, ese que le mantiene en el circuito, que le empuja a seguir adelante y tratar de seguir avanzando: conseguir su primer título de ATP.
Sus cara a cara con Alcaraz
Su trayectoria en lo que va de 2024 no es especialmente favorecedora. Unos datos que sí sonríen a Nadal. Botic Van de Zandschulp no debería ser un rival especialmente complicado para el de Manacor. Una historia diferente sería si su rival fuera Carlos Alcaraz, a quien eliminó en segunda ronda del último US Open con un 3-0. Lejos de lo que pueda ocurrir sobre la pista, Nadal está tranquilo, dentro de las circunstancias. Sabe que ha entrenado, que está en un estado de forma física lo suficientemente bueno como para afrontar el duelo y alzarse con la victoria.
La expectación, el escenario y el contexto son los ideales para que Nadal se despida por todo lo alto y que España despida a su rey de la tierra batida como se merece. Rafa lo ha ganado todo y se lo ha dado todo a España. Ese que fue capaz de acabar con la hegemonía de Federer, que para ponerse al nivel del que hasta en ese momento había sido el rey en solitario, y con quien fue capaz de superar la rivalidad para abrir paso a una gran amistad. El campeón de 22 ‘grandes’ tras 23 años de puro tenis.