Rafael Nadal Parera es para muchos el mejor deportista español de la historia, y no es para menos. Con un palmarés al alcance de pocos, se sitúa como uno de los tenistas más queridos en todos los rincones del planeta. Pero su incasable andadura por las pistas más importantes del circuito verá su fin en la semana que está por entrar, con la fase final de la Copa Davis que se jugará en Málaga.
Tras su retirada de la competición, Nadal seguirá ligado al deporte de su vida con su escuela de captación y formación de jóvenes talentos en Manacor. A escasa distancia del núcleo de esa localidad, la segunda más grande de Mallorca, se establecerá el tenista junto a su familia, en un hogar en el que poder descansar del estrés físico de la élite rodeado de lujos y prestaciones al alcance de una minoría. Porto Cristo será la localidad marítima que acogerá al exnúmero uno tras su retirada, tal y como publica El Mueble.
Una casa a orillas del mar adquirida por 4 millones de euros
El tenista español se hizo con el inmueble allá por el año 2013, cuando desembolsó la cantidad de 4 millones de euros. La finca tiene una extensión de 1.000 metros cuadrados, con una larga y colorida zona ajardinada. En ella, Nadal residirá junto a Xisca Perelló, su mujer, y su hijo Rafa Nadal Jr.
La casa tiene una larga variedad de estancias que el balear ha mostrado poco a poco en sus redes sociales a lo largo de los últimos años. El inmueble se encuentra en un conjunto de edificaciones que abarcan unos 7.000 metros cuadrados y que pertenecían a los herederos de los dueños de las Cuevas del Drach, según cuenta Look. Tras hacerse con todo ello, Nadal decidió demoler parte de las estructuras para remodelar la zona a su gusto con la ayuda del arquitecto mallorquín Tomeu Esteva.
Sin embargo, el proyecto del jugador no ha sido fácil. El español ha tenido que enfrentar unos años de disputas burocráticas debido a su localización: la parte más alta de Porto Cristo, sobre un acantilado que tiene unas vistas únicas a la zona marítima. A pesar de ello, el diseño salió adelante y ahora la propiedad consta de dos edificios conectados, piscina, gimnasio y otras comodidades.
Otra residencia en Madrid también por valor de 4 millones
Lejos de esa residencia en Mallorca, el balear también ostenta otra lujosa casa en las inmediaciones de la capital española. Allí tiene un apartamento en la zona de la calle General Castaños de Madrid. En este caso, el inmueble consta de 281 metros cuadrados con cinco dormitorios y una amplia terraza. Además, tiene una serie de estancias compartidas a nivel comunitario, como gimnasio, spa o piscina.
Esta lujosa vivienda se sitúa en uno de los edificios con las propiedades más caras de la capital española. Las estadísticas indican que el precio del metro cuadrado de la zona alcanza los 20.000 euros. Desde esa zona, el español y sus familiares tienen vistas hacia la Plaza Villa de París, el Tribunal Supremo y la Iglesia de Santa Bárbara.