Una vez más, un miembro del mundo del fútbol se ve envuelto en un delito por una agresión sexual. Dani Alves, Robinho o Hugo Mallo son algunos de los casos más recientes de futbolistas que han sido condenados por este tipo de hechos, aunque lo cierto es que la lista es mucho más larga. El último en sumarse a ella ha sido Wissam Ben Yedder, exjugador del Sevilla y del Mónaco e internacional con Francia, acaba de ser condenado por un delito de agresión sexual a una joven de 23 años por un Juzgado de Niza.
La noche del 6 de septiembre de 2024 marcó el inicio de un caso judicial que ha culminado con la condena del futbolista Wissam Ben Yedder a dos años de prisión condicional. El exjugador del AS Mónaco y del Sevilla FC fue declarado culpable de agresión sexual, conducir en estado de ebriedad y desobedecer a las autoridades. La sentencia, dictada por el tribunal penal de Niza, también incluye una multa de 5.000 euros, la suspensión de su licencia de conducir por seis meses y la obligación de indemnizar a la víctima con 6.500 euros.
El incidente que llevó a esta condena ocurrió en la localidad de Cap-d’Ail, donde Ben Yedder fue arrestado tras la denuncia de una joven de 23 años. La víctima acusó al futbolista de intentar besarla y luego masturbarse frente a ella en el coche del padre del jugador. Durante el juicio, que tuvo lugar hace aproximadamente un mes, Ben Yedder alegó no recordar los hechos debido a su estado de ebriedad, afirmando que había estado bebiendo durante varios días debido a problemas personales y profesionales. “Es un período un poco difícil, tuve problemas con mis agentes, con mi esposa… llevaba tres o cuatro días bebiendo”, aseguró. Y añadió: “Empecé a tener problemas hace dos años y desde entonces he tenido dificultades. Ya bebía antes, pero en pequeñas dosis y de vez en cuando (…) había estado bebiendo y no recuerdo qué pasó. A causa del alcohol tengo problemas de memoria”.
Justo antes de su arresto, los agentes pudieron comprobar que había bebido tras negarse a obedecer sus órdenes y comprobar que estaba conduciendo en estado de ebriedad. “Tomé dos botellas, no era yo mismo. Sé que es malo, estaba bajo los efectos del alcohol, debería haberlo dejado, pero no era yo mismo. Soy una persona solitaria, me cuesta confiar en la gente. Me han traicionado en bastantes historias. Me refugié solo en el alcohol, pero me doy cuenta de que fue el peor error de mi vida”, alegó.
La condena contra Ben Yedder
El fiscal de Niza había solicitado inicialmente una pena de dos años y medio de prisión, de los cuales 18 meses serían en libertad condicional. Sin embargo, el tribunal optó por una sentencia más leve, aunque igualmente significativa, que incluye medidas de reparación hacia la víctima. Ben Yedder expresó su arrepentimiento durante el juicio, pidiendo disculpas tanto a la denunciante como a su familia, y atribuyendo su comportamiento a problemas con el alcohol.