Durante más de una década, el circuito del tenis profesional estuvo monopolizado por tres hombres que, juntos, suman 66 Grand Slam. Roger Federer, Rafa Nadal y Novak Djokovic marcaron una generación de oro en el mundo del deporte, a la que ya han empezado a relevar. El Suizo colgó su raqueta en 2022, con 20 grandes competiciones a sus espaldas; el español, con 22, anunció que se despedirá de las pistas en la Copa Davis de 2024; y, el serbio, con 24, es el único que sigue activo a sus 37 años.
Pese a ser el que menos Grand Slams tiene de los tres, Federer se ha ganado el respeto de todo el mundo dentro y fuera de su disciplina. Ivan Ljubičić, su entrenador desde 2016 hasta el día de su retirada, recordó su tiempo al lado del de Basilea en el programa Retour Gagnant, en Eurosport.
“Los detalles, la excelencia en todas las cosas que hizo. La preparación de las entrevistas, sus calentamientos, las cenas... todo lo que hacía, lo hacía con gran diligencia. A menudo me encontraba sin saber qué decir, porque él era perfecto”, aseguró el croata.
Un ejemplo de vida
El balcánico no es el único que se ha rendido ante los pies de Roger. En 2022, Nole declaró que había sido un honor competir contra él: “Roger, es difícil ver este día y poner en palabras todo lo que hemos compartido juntos en este deporte. Más de una década de increíbles momentos y batallas para recordar. Tu carrera estableció el ejemplo de lo que significa alcanzar la excelencia y liderar con integridad y aplomo”.
“Es un honor conocerte dentro y fuera de la cancha, y por muchos años más. Sé que este nuevo capítulo deparará cosas increíbles para ti, Mirka, los niños, todos tus seres queridos y los fans de Roger todavía tienen mucho que esperar. De nuestra familia a la suya, le deseamos mucha alegría, salud y prosperidad en el futuro. Estoy deseando celebrar tus logros y verte en Londres”, finalizó su agradecimiento en redes sociales.
Rafa Nadal, su eterno rival en la cancha y amigo fuera de ella, tampoco olvida los momentos que ha vivido con el suizo. El mallorquín aprovechó una visita a su escuela de tenis para recordar una conversación que mantuvieron. “Allí en las montañas (Dolomitas, en Italia), tuvimos una interesante conversación sobre una palabra que creo que es muy importante: el legado. Los dos estábamos de acuerdo en una cosa que creemos que es de máxima importancia”, comenzó.
“¿Cómo nos gustaría ser recordados en unos años? ¿Qué queremos que las futuras generaciones piensen de nosotros? Los dos estamos muy seguros de nuestras respuestas. Es fantástico que nuestros logros, títulos y récords se reconozcan, pero, con el paso de los años, es probable que alguien nuevo llegue y lo haga mejor”, reflexionó en su intervención.
“Lo que es importante es la manera en la que seremos recordados. Los dos queremos ser recordados como buenas personas. Vivimos en una sociedad que se centra en el qué y en el ahora, pero a nosotros nos gustaría destacar la importancia del cómo. La gente de vuestro alrededor debería veros como alguien a quien copiar por sus valores”, explicó Nadal.