El tenista suizo Roger Federer vuelve a los focos de las noticias por informaciones ajenas al deporte que tanto le dio durante tantos años de carrera. El exnúmero uno mundial y ganador de 20 títulos de Grand Slam se encuentra sumido en un proyecto inmobiliario a orillas del lago de Zúrich, que una vez más vuelve a quedarse en suspenso tras la intervención de la justicia. Aunque en el pasado septiembre el suizo vio como la ciudad de Rapperswil y el cantón de St. Gallen le dieron el visto bueno a la ejecución, ahora, la Oficina Federal de Medio Ambiente (FOEN) ha interpuesto un recurso contra Roger Federer por esa misma acción.
A consecuencia de esta denuncia, la justicia paraliza el proyecto inmobiliario a expensas de ver la evolución del recurso impuesto por la organización medioambiental. Por tanto, hasta nueva resolución, Federer tendrá que esperar para seguir con su nueva construcción en una localización privilegiada natural de Zúrich.
Así es el proyecto paralizado
El considerado como mejor tenista de la historia, para muchos, tenía en mente construir un nuevo cobertizo para embarcaciones con un pontón y un canal de acceso, para lo que sería necesario la demolición del actual muelle, según informa Blick. Aunque todavía no está establecida la razón por la que FOEN ha intervenido, sí que se conoce que tanto la ciudad de Rapperswil y el cantón de St.Gallen no van a pronunciarse más respecto a este conflicto, al que ellos dieron el sí en septiembre y que ahora se ve bajo disputa. Además, Acorde a las informaciones de Linth Zeitung, una denuncia de este tipo es “rara”, ya que normalmente las autoridades solo recoge violaciones de la propia ley que son claras y manifiestas.
Hoy el lago de #Zurich estaba muy lindo, acá les dejo un videito y unas fotos 😉 #Suiza
— Viviendo en Suiza 🇨🇭 (@viviendoensuiza) January 28, 2024
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Una licencia para Federer
Tal y como establece la ley, en un principio está prohibida la construcción fuera de las zonas catalogadas para ello y en emplazamientos reservados al agua, como lo es la orilla del lago de Zúrich. Sin embargo, el suizo obtuvo el permiso para realizar su proyecto pese a las anteriores indicaciones, que indican, a priori, que no debería haber sido así.
Por ello, como ya había autorización para una zona de amarre, el suizo se adentró con los inicios de la obra, que vería como en vez del plan inicial de construir 75 metros cuadrados, ahora tendría que reducir esa cantidad a 50. A pesar de ese cambio de tamaño, las organizaciones medioambientales siguen descontentas con la idea de Federer. El enfado es tal, que las entidades ven con buenos ojos la denuncia que ha paralizado la construcción. “Esto es muy gratificante para nosotros”, afirma Victor von Wartburg, presidente de Rives Publiques, una asociación de protección bancaria, en el mismo medio.
Esa misma asociación lleva años en su lucha para evitar que Roger Federer se salga con la suya, y por ahora ven su objetivo conseguido. Sin embargo, a pesar de la evidente oposición de varios organismos, no está del todo claro que puede ocurrir con ese nuevo cobertizo para botes. Ahora, todo queda en la decisión de la justicia, que tendrá que evaluar la legalidad de la ejecución para dar el visto bueno para su concesión o denegar el proyecto del suizo definitivamente.