Ander Martín, bronce en el Mundial de Remo Beach Sprint: “Siempre tengo claro que algo grande va a llegar. Que si trabajo, va a llegar”

El remero español sueña con ganar el oro en los Juegos Olímpicos de Los Angeles y ya está trabajando para cumplir su objetivo

Guardar
Ander Martín, deportista español de
Ander Martín, deportista español de remo. (Ander Martín)

Hace poco más de una semana (el 16 de septiembre), Ander Martín conquistó el bronce en el Mundial de Remo Beach Sprint junto a su compañera y amiga Esther Briz. Sin embargo, cerraron la competición con un sabor agridulce. “No estoy contento del todo porque tuvimos un fallo mecánico en el barco que nos dejó fuera de la pelea por el oro. Y encima en la final B marcamos un tiempo más rápido que muchos y casi 10 segundos más rápidos que la embarcación que ganó”. Ahora solo piensa en seguir mejorando y seguir compitiendo, siempre con la mira puesta en su gran objetivo: estar en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028.

Su andanza en el mundo del remo comenzó cuando era pequeño y por casualidad. “Era un chico muy inquieto de pequeño. Mi madre ya no sabía qué hacer conmigo. Pasé por mil deportes, por los típicos como fútbol, balonmano, baloncesto. Hice de todo, pero no me terminaba de enganchar ninguno”, recuerda Ander, quien destaca que siempre ha sido “un poco diferente”. A él lo que le gustaba, aparte de jugar al fútbol, era ir a pescar con su padre, o estar en el mar, ya que su abuelo era pescador y su familia siempre ha estado muy ligada al mar. Fue entonces cuando habló con su madre y le dijo: “Mamá, yo quiero algo de la mar”. En un primer momento, el deporte al que iba a apuntarse era vela, pero entonces el destino o las casualidades que a veces tiene la vida le llevaron por otro camino.

“Entró un chico a trabajar con mi madre que estaba en el club de remo y le dijo: ‘Tráetelo aquí’. Lo probé y desde el primer día ya remé y fue una sensación indescriptible, el deslizarte en el agua y estar todo el día viendo barcos. Eso fue lo que a mí me enamoró desde el primer día”, relata el piragüista. Desde entonces ya nunca ha soltado los remos. “Yo no soy un chico que haya destacado un montón desde el principio, pero sí que era muy muy peleón a la hora de fijarme objetivos”. Una característica que rápidamente jugó a su favor. En el primer año que compitió en España, terminó con un quinto puesto. Al año siguiente, en la categoría de alevines, con tan solo 12 años, subió al podio con un tercer puesto.

Tras su momento de gloria, tuvo un periodo de sequía donde los títulos y las medallas se le resistían, pero poco a poco entendió que si trabajaba los resultados llegaban. Y así fue. Tras varias medallas nacionales, con 16 años le convocó el equipo nacional. “Fue ahí cuando dije ‘ostras, yo creo que esto es lo mío, creo que es lo que me gusta y por lo que podría pelear en un futuro’”. Él luchó y creyó incluso cuando los resultados no acompañaban: “Yo sabía que iba a llegar, no sé, algo en mi interior me decía que iba a llegar”.

Ander Martín, deportista español de
Ander Martín, deportista español de remo. (Ander Martín)

Hace poco volvió a pasar por un periodo de “sequía”. El Centro de Alto Rendimiento de Sevilla le abrió sus puertas hace siete años, un tiempo en el que compitió en la modalidad de remo tradicional. Los primeros años en la capital andaluza no registró los resultados que él esperaba, aunque fue el séptimo del mundo (que se dice pronto). Tampoco en ese momento, donde los títulos se hicieron esperar, tuvo ninguna duda: “Siempre tengo claro que algo grande va a llegar. Que si trabajo, va a llegar cueste lo que cueste”.

Ahora su vida está en Murcia, pero, sobre todo, en Torrevieja, su ciudad, su casa y donde puede entrenar en la modalidad de Remo Beach Sprint, que, además, ya que es un deporte olímpico y estará presente en Los Ángeles. Ander reconoce que Murcia tiene muy buenas instalaciones en el CAR y el acceso al agua es muy bueno. Sin embargo, para él estar en su tierra y entrenar allí lo es todo. “Yo me fui de casa a los 16 o 17 años y lo que más valoro es trabajar en casa, con mi gente, en mi sitio. Con eso para mí ya estoy ganando. Es la felicidad plena, el poder trabajar aquí en mi sitio. Es una suerte que pocos tienen”. Ander ya está trabajando para llegar a los Juegos de Los Ángeles en las mejores condiciones, porque él tiene claro que va a ir a por el oro, mientras lo compagina con su empresa Beach Sprint, donde cuenta con un gran equipo detrás que le permite desconectar cuando tiene que entrenar.

“Vengo de una familia muy humilde. Hemos pasado, como todo el mundo, por cosas a lo largo de la vida”. A principios de año falleció su abuela, un duro golpe para su madre, que desde hacía tiempo era quien se encargaba de cuidarla. Una pérdida que coincidió con su regreso a casa: “Ella está levantado cabeza ahora, con mi vuelta a casa, paso más tiempo con mi madre. Poder disfrutar de una comida con ella no tiene precio. Para mí es mi referente en todo. Cuando tengo un día malo es mi refugio. Es mi espacio de tranquilidad”.

Esther Briz, su pareja en el remo

Ander Martín y Esther Briz,
Ander Martín y Esther Briz, pareja en la modalidad de remo beach sprint. (Ander Martín)

Su otro gran apoyo dentro del mundo del remo, su pareja en este deporte es Esther Briz. “Yo creo que somos una pareja que se compagina en absolutamente todo. Tenemos una confianza plena y ciega el uno en el otro”. La modalidad en la que ambos compiten y donde acaban de ganar el bronce mundial es una categoría “en la que para mí sería casi imposible tener esto con otra persona y eso ya nos pone un paso enorme por delante del resto”. Ambos piragüistas se conocen desde alevines, cuando tenían 12 o 13 años, y desde entonces se hicieron amigos. Sin embargo, nunca se habían planteado competir juntos hasta que una broma sentó la idea en la mente de ambos.

Fue después de una competición, cuando eran juniors, cuando ambos dijeron: ‘Un año tenemos que competir en dobles juntos’. “Pues tontea, tontea, que en cuanto tengamos tiempo lo vamos a hacer”, recuerda que dijo ella. “Así empezó, con una broma. Y llegó el momento de montarnos juntos. Y a día de hoy tenemos cuatro oros mundiales juntos”, explica.

El oro olímpico, un sueño por cumplir

Tras haber conquistado el bronce mundial, el piragüista de Torrevieja tiene claro cuál es su siguiente objetivo. Ander tiene un sueño en mente que le gustaría cumplir en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles: el oro olímpico. Sin embargo, para ello todavía quedan cuatro años, un largo periodo donde la preparación física, pero sobre todo mental, juegan un papel importante. “Yo creo que la clave está en marcar objetivos a corto-medio plazo y más enfocarnos en el día a día. Y saber que si trabajas en el ahora, el futuro lo tienes asegurado”. De momento, encara la preparación con un podio, mientras sigue soñando con colgarse el oro en Los Ángeles.

Entrevista a Antía Jácome, piragüista clasificada para los Juegos Olímpicos de París 2024.
Guardar