El Real Madrid de los ‘Galácticos 2.0′ buscará poner fin a la mala racha frente al Betis: no gana a los verdiblancos en Liga desde hace dos años

El equipo de Carlo Ancelotti ha comenzado el campeonato liguero con muchas dudas y una falta de capacidad resolutiva en cuanto a juego. Tras las tres primeras jornadas, el Real Madrid tan solo ha sido capaz de ganar cinco puntos de los nueve en juego, es decir, únicamente ha ganado un encuentro y ha empatado dos, ante equipos bastante inferiores a niveles económicos: RCD Mallorca y UD Las Palmas.

Ahora, en la jornada 4, el equipo recibe en el Santiago Bernabéu a un equipo que en los últimos dos años ha plantado cara a los blancos: el Real Betis Balompié. El club sevillano encadena tres partidos consecutivos sin perder frente al equipo campeón de 15 Copas de Europa, un hecho que pocos combinados pueden presumir de haber logrado. Con tres empates en esas últimas citas, la última victoria del Madrid a los béticos data de 3 de septiembre de 2022, por lo que restan dos días para hacerse los dos años exactos.

Si retrocedemos más atrás en el tiempo, se ve que el Real Madrid ha tenido problemas para sacar adelante sus partidos frente a los de Villamarín. Desde la temporada 2018-2019, el equipo blanco solo ha podido ganar 4 partidos de 12 contra el Real Betis. Una estadística que asusta al madridismo por la situación actual de mal juego que atraviesa el equipo.

Tras el inicio desilusionante de lo que prometía ser una apisonadora en liga, la plantilla debe dar un paso al frente y empezar a carburar lo antes posible. Con su eterno rival enchufado desde el primer minuto, la amenaza de irse al parón de selecciones con una distancia de siete puntos está muy presente. En el siguiente partido, los blancos tendrán una prueba de fuego ante su afición que ya empieza a pedir resultados y a la que no le valdrá más que ganar.

Así, son Mbappé y Vinicius los llamados a tirar del carro en esta situación crítica que el Real Madrid atraviesa, pero que todavía no preocupa a los máximos dirigentes del club porque creen que será cuestión de tiempo que la cosa vaya a mejor. Es más, los hay que hacen comparaciones con aquel equipo que levantó tres Champions seguidas: ese plantel también tuvo sus más y sus menos antes de hacer historia.

Carlo Ancelotti deberá encontrar la fórmula para que este equipo recupere su chispa, su magia. Esa característica que tenía el equipo la temporada pasada brilla por su ausencia este inicio de campaña. Los jugadores todavía no se han terminado de adaptar al nuevo sistema de juego tras la llegada de Kylian Mbappé. La relación con el atacante francés es extraordinaria, Vinicius Jr., Rodrygo Goes y Jude Bellingham entablan una buena relación con el exjugador del París Saint-Germain.

Sin embargo, a pesar de en lo personal llevarse bien, todavía no han acabado de asentarse en el verde. Durante los partidos hay momentos que parecen molestarse entre ellos por su costumbre de caer a la banda izquierda, lo que causa una reducción del espacio de juego y permite una defensa más efectiva de los rivales. No obstante, el problema no reside solo aquí. El equipo se parte por completo en transición y deja jugar muy libremente a los rivales en salida de balón.

Además de esos problemas en ataque y defensa, falta creatividad en salida de balón desde atrás. La baja de Toni Kroos, la brújula de este equipo en los últimos años, ha hecho mucho daño. Los merengues carecen de un perfil de ese estilo y lo están notando mucho en el inicio de su juego y en la hora de romper líneas.

No obstante, el entrenador italiano podría haber encontrado una posible solución en Arda Güler. El joven jugador turco ha demostrado ya sus cualidades técnicas en Madrid. Con su habilidad para encontrar pases filtrados y su desparpajo a la hora de pisar área, el mediocentro se ha ganado a toda la afición madridista y a ‘Carleto’, que está encantado de tenerlo en la plantilla, al igual que con Kylian Mbappé.