La inesperada y dolorosa eliminación de Carlos Alcaraz este jueves en la segunda ronda del Abierto de Estados Unidos ha dejado a la delegación española por primera vez en 25 años sin un representante masculino en el tercer cruce de un ‘grand slam’.
La última vez que eso sucedió fue en el Abierto de Australia de 1999. Desde entonces, al menos un español se coló en la tercera ronda de cada ‘grande’, pero en Flushing Meadows ya no queda ninguno transcurridos apenas cuatro días de competición.
Las esperanzas de España se concentran ahora exclusivamente en el cuadro femenino, donde Paula Badosa, que atraviesa un gran verano, y Jessica Bouzas, también desplegando un estupendo tenis en Nueva York, sí podrán competir por un puesto en los octavos de final.
La eliminación de Alcaraz se une a las de Albert Ramos, Alejandro Davidovich, Pablo Carreño y Jaume Munar en primera ronda y de Roberto Bautista, Roberto Carballés y Pedro Martínez en su segundo partido.
“He dado pasos hacia atrás en tema de cabeza”
En el mismo año en el se proclamó campeón de Roland Garros y Wimbledon, además de haber ganado la plata en París 2024, Alcaraz, número 3 de la ATP, ha perdido de forma inapelable ante el neerlandés Botic Van de Zandschulp, que ocupa la posición 74 del ranking. El murciano no ha conseguido imponerse en ninguno de los tres sets: 6-1, 7-5 y 6-4 en dos horas y 19 minutos.
En una noche llena de impotencia y de colapso tanto mental como de tenis para el murciano, Alcaraz no sufría una derrota tan temprana en un ‘grand slam’ desde la segunda ronda de Wimbledon en 2021, que hasta hoy era su peor resultado en el cuadro principal de un ‘grande’.
“La verdad es que lo que siento ahora mismo es que en vez de dar pasos hacia adelante he dado pasos hacia atrás en tema de cabeza. Y no entiendo por qué”, reflexionó el vencedor del Abierto de EE.UU. en 2022.
Las miradas están ahora en Bouzas y Badosa
En la competición femenina sí hubo buenas noticias para España con la clasificación de Jessica Bouzas (n.74), que venció en segunda ronda a la británica Katie Boulter (n.33) por 7-5 y 7-5 en una hora y 45 minutos. La gallega, debutante este año en el Abierto de EEUU, se enfrentará en la tercera ronda a la estadounidense Jessica Pegula (n.6), que se deshizo de su compatriota Sofia Kenin (n. 54) por 7-6(4) y 6-3.
En cambio, Sara Sorribes (n.115) perdió en segunda ronda contra la brasileña Beatriz Haddad Maia (n.21) por 6-2 y 6-1 en una hora y 13 minutos. El viernes será el turno de Badosa (n.29) con ración doble: su duelo individual de tercera ronda contra la rumana Elena-Gabriela Ruse (n.122) y, posteriormente, su debut en la competición de dobles mixto con su novio, el griego Stefanos Tsitsipas.
La conmoción por la derrota de Alcaraz llegó al final de una jornada de mucho menos calor en la Gran Manzana que el miércoles y en la que avanzaron favoritos al título como la polaca Iga Swiatek (n.1) o el italiano Jannik Sinner (n.1).
Otros aspirantes destacados que se ganaron el derecho a continuar en Nueva York son la italiana Jasmine Paolini (n.5), la mencionada Pegula (n.6) o el ruso Daniil Medvedev (n.5). En cambio, hicieron las maletas el polaco Hubert Hurkacz (n.7), la japonesa y doble campeona en Nueva York Naomi Osaka (n.88) y la kazaja Elena Rybakina (n.4), que se retiró por lesión.
Noticia elaborada por EFE