La polémica Maffeo-Vinicius llega a su fin: así empezó la disputa hace un año y así la han zanjado los jugadores

No, el tiempo no todo lo cura. O, al menos, no siempre. Vinicius Jr es persona non grata en Son Moix y así se lo demostraron durante el partido de este fin de semana. Mallorca y Real Madrid inauguraban la competición doméstica en un partido marcado por viejas guerras, pero no olvidadas. Cada vez que el balón pasaba por las botas del delantero brasileño una ensordecedora pitada se apoderaba de Son Moix. ¿El motivo? Una antigua disputa con Pablo Maffeo que continuó durante el estreno de LaLiga. Patadas, entradas duras, forcejeos... Y entonces llegó la paz. El defensa bermellón decidió zanjar la polémica durante una pausa para la hidratación.

Fue hace un año. El Real Madrid y el Mallorca se veían las caras en un partido de LaLiga. En la banda izquierda, Pablo Maffeo defendiendo la portería bermellón y Vinicius protagonizando el ataque blanco por ese mismo costado. Los forcejeos comenzaron a ser una constante por ese lado del campo, así como las entradas. El partido pasó a un segundo plano para ellos, que inauguraron su guerra particular. Cada vez que el balón caía de ese lado, la pelea estaba asegurada. El problema es que a medida que pasaban los minutos, la tensión entre ambos comenzaba a aumentar.

Las entradas eran cada vez más duras y los reproches también. El delantero brasileño no dejaba de protestar al árbitro cada entrada del defensa del Mallorca, mientras el bermellón no cesaba en su empeño de evitar que Vinicius consiguiera subir el balón por esa banda. Tales fueron las protestas del futbolista del club blanco que Maffeo incluso llegó a hacerle el gesto de “llorón” al brasileño. Lo que provocó la ira de Vinicius y de toda la grada madridista. Por su parte, la afición del Mallorca tampoco perdona que el brasileño mostrase el escudo del Real Madrid a la grada balear tras finalizar la primera parte. Un gesto que no hizo más que incendiar el ambiente.

Ahora un año después, ni la grada de Son Moix había olvidado, ni los propios jugadores. Maffeo propinó una fea entrada a Vinicius durante la primera mitad que le valió una tarjeta amarilla. Fue un pisotón en la zona del gemelo que él mismo reconoció que era de tarjeta. Sin embargo, fue él también quien decidió que era el momento de poner punto y final a la disputa con el brasileño y tomó cartas en el asunto.

Según explicó el defensa del Mallorca en el programa Jijantes FC, este se acercó al jugador del Real Madrid durante la pausa de hidratación para zanjar la disputa. “En la pausa de hidratación le he dicho ‘dejémonos de tonterías’, comenzaba Maffeo. Y añadió: “Lo que pasó, pasó. Hemos estado ‘en plan guay’. Yo no tengo ningún problema con él. Pienso, por amigos en común que tenemos, que es un buen tío fuera del campo. Y yo me lo creo”.

Y concluye: “No tiene sentido seguir así, con estas cosas. Al final es una mala imagen y no me gusta. Le he pisado y le he perdido perdón, es amarilla, pero ha sido sin fuerza. No le veo maldad a Vinicius, como a otros. Le fallarán cosas como a todos, pero si las pule será mejor”. De esta forma, los futbolistas han puesto fin a una disputa que comenzó hace un año.