Por fin lo ha conseguido. Carlos Alcaraz ha conquistado por primera vez el título de Roland Garros, un torneo que hasta ahora se le resistía. El español llegaba a la ansiada final con ganas de demostrar por qué es el número cuatro del mundo, y por qué es uno de los mejores jugadores de todo el circuito de la ATP. Sin embargo, enfrente se ha encontrado con un sólido Alexander Zverev dispuesto a lo mismo que el español: imponer su tenis y conquistar el título. Finalmente, el partido ha caído del lado del murciano, que se ha impuesto por un 3-6, 6-2, 7-5, 1-6 y 2-6.
Carlitos lleva soñando con ganar este trofeo desde que tenía tan solo 12 años. Ahora nueve años más tarde, por fin lo ha conseguido: Alcaraz es campeón de Roland Garros. Tras dos semanas de enfrentarse a los mejores tenistas del mundo, el de Murcia por fin ha conquistado ese trofeo para el que tanto tiempo lleva preparándose. “Mi torneo preferido es Roland Garros, quiero ganar allí, y en Wimbledon”, decía un Carlitos de 12 años. Ahora, años más tarde, más bagaje y experiencia por fin lo ha conseguido.
El español saltaba a la pista Philippe Chatrier como quien sabe que se lo juega todo, como quien sabe que es su oportunidad para brillar y con este sentimiento comenzaba el partido. Alcaraz ha sido capaz de romperle el primer servicio a su oponente, aunque este se lo arrebata al español para poner el marcador en tablas de nuevo. Sin embargo, Carlitos se lo ha roto dos veces más al alemán para imponerse con un 3-6 en el mercador y llevarse el primer set. Las cosas empezaban de cara para el español, por delante en el marcador en una final en París. Sin embargo, las cosas no iban a ser tan fáciles.
El primer juego del segundo set ha vaticinado lo que sería el partido: un duelo digno de una final de Roland Garros. Ya nadie se acordaba de la lesión en el antebrazo de Alcaraz, ni siquiera el propio Carlitos, así como tampoco se acordaba ninguno de los presentes de que Zverev había vencido a, ni más ni menos, que Rafa Nadal en primera ronda. Eran solo dos hombres luchando por un mismo fin, eran solo dos tenistas luchando por ganar Roland Garros. Ese primer juego del segundo set ha sido de los más disputados de todo el torneo, con tantos iguales a 40 y ventajas para ambos lados que parecía que nunca se acabaría. Pero lo ha hecho y del lado del español. 0-1 en el marcador para Alcaraz.
Pero el alemán le ha roto el servicio para imponerse por 3-2, una situación que se repetiría dos servicios más tarde. El número 4 del mundo iba a dar juego. Quería demostrar que él también quería conquistar París. Y con esas se llegaba el segundo set. 1-1 en el marcador por 3-6 y 6-2. El encuentro ha estado igualado a lo largo de todo el partido entre el español y el alemán.
Un tercer set apoteósico
El tercer set llegaba para ambos como la oportunidad de adelantarse en el marcador y desmarcarse de su rival. Ambos comenzaban haciendo lo propio y ganando los juegos de sus servicios. Así se ha ido el marcador hasta el 2-3, pero un férreo Alcaraz ha conseguido imponer su tenis y ponerse por delante. Sin embargo, a partir de ese momento, el español se ha venido abajo, mientras que Zverev se ha crecido en la Philippe Chatrier. El alemán ha sufrido en pista, pero más hacía sufrir a Carlitos, y ha cerrado el set con 7-5. El duelo empezaba a sonreírle.
El cuarto set ha sido entero de Alcaraz. En un apoteósico, férreo y titánico set del murcio, en el que no ha dado espacio al alemán, le ha arrebatado toda la confianza que había ganado, le ha arrebatado todo el tenis que tenía, todas las fuerzas con las que contaba para hacerse con el partido. El español ha ganado por 1-6, hundiendo toda la moral de su rival.
Alcaraz toca el cielo de París
El último set, aunque más igualado al inicio, no ha tenido mayores complicaciones para Carlitos. Quien a medida que iba ganando puntos se veía un paso más cerca de conquistar París, un paso más cerca de hacerse con el ansiado título de Roland Garros. Y así ha sido. El español ha conseguido romper el segundo servicio del alemán para ponerse por delante y volver a romper cuatro juegos más tarde y certificar un 2-5. A tan solo un juego y el servicio a su favor, Alcaraz casi se veía ganador. Y lo ha conseguido.
Finalmente, el español ha conquistado su primer Roland Garros, el primero ante un sólido Zverev. El primero con un antebrazo que le restaba confianza en las primeras fases del torneo. El primero en su trayectoria, el primero de, probablemente, muchos.