Los exfutbolistas que son dueños de clubes de fútbol: del Andorra de Piqué al Inter Miami de Beckham

“Colgar las botas”. Se trata de una de las expresiones que más les cuesta escuchar a los jugadores. Tras toda una vida dedicada al fútbol, llega un momento en que el cuerpo y, en especial, las piernas dicen basta. Es ahí cuando surge la pregunta: ¿Y ahora qué? Una de las vías que más deportistas siguen es hacerse entrenadores, coger la pizarra y ponerse al frente de un equipo para intentar transmitir todo lo aprendido. Este es el caso de Pep Guardiola, Luis Enrique, Zinedine Zidane, el Cholo Simeone o Andrea Pirlo. Otros optan por ponerse detrás de un micrófono como comentaristas de partidos o de las tertulias de fútbol en distintos medios de comunicación.

Sin embargo, algunos deportistas llevan su carrera dentro del mundo del fútbol un paso más allá como dueños de un equipo. Este es el caso del ahora exfutbolista Gerard Piqué, quien decidió adquirir el FC Andorra cuando todavía vestía la camiseta del Barcelona. La operación se hizo oficial en el año 2018 a través de su empresa Kosmos, después de que los socios del club aprobaran la compra en una Asamblea General Extraordinaria. En ese momento, el equipo estaba pasando por una mala situación económica, ya que arrastraba una deuda de 200.000 euros. Una cantidad de la que se hizo cargo el exdefensa catalán, con el fin de sanear las cuentas.

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El español no ha sido ni el primero ni el único que adquirió un club de fútbol. Ronaldo Nazario dio el salto a la dirección de un equipo al comprar el Valladolid en 2018, exactamente el 3 de septiembre de ese año. En un primer momento, el ex del Real Madrid y Barcelona adquirió el 51% de las acciones del club vallisoletano al llegar a un acuerdo con el entonces presidente y propietario Carlos Suárez. El coste de la transacción ascendió a 30 millones de euros. “Queremos crecer. Esta nueva gestión estará definida por cuatro palabras: competitividad, transparencia, revolución y social. Tenéis en mi un enamorado del club”, aseguró entonces el brasileño.

Ahora, tras años al frente del equipo, desde hace unos meses Ronaldo ha abierto la puerta a vender la entidad deportiva. En una rueda de prensa en la que confirmó que había traspasado el paquete accionarial del Cruzeiro (el club brasileño del que también era propietario), aseguró que el equipo blanquivioleta sería el siguiente.

David Beckham, además de ser futbolista, también ha ejercido como modelo, dos profesiones que le han llevado a recorrer medio mundo. De Ferbie Boy en el Manchester United; a galáctico con el Real Madrid, estrella de Los Ángeles Galaxy, miembro del Milán y veterano del PSG. Tras colgar las botas, el inglés tenía claro que quería hacer algo relacionado con el mundo del fútbol y decidió comprar el Inter Miami CF.

Fue en el año 2018, cuando se convirtió en dueño del equipo de la MLS. Además desde el año 2021, junto con Jorge y José Mas, se hizo con el control total de las acciones del club. Desde que el exjugador del Real Madrid llegó a este equipo estadounidense, han sido muchos lo que han optado por pasar los últimos años de su carrera en este club. Leo Messi es la estrella de la plantilla, aunque no es la única. Sergio Busquets, Jordi Alba o Luis Suárez son otros de los deportistas que también visten esta camiseta.

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Cuando se escuchan los apellidos Giggs, Scholes, Butt y los Neville solo se puede pensar en una cosa: Manchester United. Sin embargo, al igual que muchos otros jóvenes, ellos también comenzaron en el equipo de barrio. Unos colores que, por muchos que pesen los años y su carrera haya virado por otros caminos, nunca olvidarán. Ryan Giggs, Paul Scholes, Nicky Butt y los hermanos Gary y Phil Neville (a quienes se conoce como la Clase del 92), decidieron unirse para comprar el Salford City, un club de las afueras de Manchester, que jugaba en la octava categoría del fútbol inglés.

Desde el año 2014, este equipo de barrio cuenta con unos dueños oro, a quienes años después se sumó otro ex de los diablos rojos, David Beckham, y el dueño del Valencia, Peter Lim, quienes han conseguido revivir el club, ya no solo a nivel deportivo (actualmente se encuentran en la cuarta categoría), sino también a nivel de infraestructuras e instalaciones, ya que cuando adquirieron el Salford, el campo estaba medio derruido.