27 de enero. Xavi Hernández anuncia, tras perder 3-5 contra el Villarreal en Liga, que deja el banquillo del FC Barcelona el 30 de junio: “Creo que liberará a los jugadores y destensará la situación general del club […] Fui una solución hace dos años y tres meses, pero ahora, pensando con el corazón y pensando en el club, para el que quiero lo mejor, lo mejor es que lo deje […] Es la sensación de que el club va a mejorar con nuestra marcha”.
25 de abril. El presidente azulgrana, Joan Laporta, y Xavi comparecen para anunciar que las cosas han cambiado y que el técnico seguirá finalmente un año más. “Necesitan una referencia como Xavi en el vestuario. Ha habido unanimidad en la Junta Directiva para que siguiese […] Con Xavi, siempre tuve ganas desde el primer momento de que siguiese. Él representa estabilidad para el proyecto, y esto es una de las claves del éxito, sin duda”, afirmó entonces el dirigente. “El proyecto no está acabado, creo que puede ser ganador. Estoy convencido, ilusionado… en tres meses he visto a los jugadores, al staff… he hablado con todos y creo en todos ellos. Rectificar es de sabios y no tengo problema. Nunca fue un tema de ego ni de dinero”, le siguió el exjugador culé.
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17 de mayo. En un nuevo giro dramático de los acontecimientos, RAC1 ha adelantado que Laporta ha decidido que Xavi, como se dijo a principios de año, se vaya ya, cambiando de opinión en menos de un mes. El final de la temporada, poco convincente, ha tenido su parte de culpa a la hora de cortar por lo sano. Sin embargo, lo que realmente ha causado una pérdida de confianza fatal ha sido el discurso del entrenador en la previa del choque ante el Almería, plagado de frases, según parece, nada acordes a lo que le había transmitido recientemente en privado al mandamás del barcelonismo.
Las palabras de Xavi que pueden haberle costado el puesto
Lo que peor sentó a Laporta fue el tono pesimista de Xavi con respecto a la competitividad futura del Barça y la imposibilidad de fichar como antaño (en cuanto que pudo hacer varias incorporaciones en su momento). “Vamos a intentar competir (con el Madrid). La situación es difícil a nivel económico, que no tiene nada que ver con 25 años atrás. Ahora no estamos en las mismas condiciones con clubs con mejor fair play. El aficionado debe saberlo. No quiere decir que no intentemos lograr los objetivos”, expuso primero.
🎙️ "Cuesta competir contra el Madrid en Liga y contra los grandes equipos de Europa".
— Raúl Orvañanos (@RaulOrvananos) May 15, 2024
Xavi Hernández | DT Barça
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“El aficionado barcelonista debe entender que la situación es muy complicada para competir económicamente. No tiene nada que ver con la que teníamos 25 años atrás. El entrenador venía y decía ‘quiero a este, este y este’. Ya no funciona así. Yo lo entiendo y así nos vamos a ajustar a ello. Eso no significa que no vayamos a competir. Necesitamos estabilidad y tiempo. Hay cosas buenas para competir”, añadía Xavi. Detectarse una cierta crítica a las circunstancias con las que debe convivir y trabajar, cuando esta no se habría transmitido de puertas para dentro, habría sabido a cuerno quemado a la cúpula barcelonista. Empezando por el presidente.
Otro mensaje que echaría más leña al fuego fue el que Xavi lanzó sobre Vitor Roque, tan protagonista últimamente por su falta de oportunidades. “La intención no era que viniese enseguida. Así lo planificamos. Que no viniera ahora, pero teníamos la opción de incorporarlo, por su formación. Que conociera el club y que compitiese. No hay debate. Se está formando. Hay futbolistas por delante y por eso juega menos. Esto ha pasado toda la vida”, aseguró al respecto.
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Tampoco ayudarían una supuesta poca voluntad para implantar cambios en su método y la tirantez con el director deportivo, Deco. Ni él ni Laporta viajaron a Almería, algo muy sintomático de la crisis reabierta ahora. Cuando el curso ya esté finiquitado (a poder ser, con la segunda plaza liguera bajo el brazo), todo apunta a que se producirá el relevo de Xavi. Salvo que el guion vuelva a modificarse a última hora y los dardos, otra vez, pasen a ser flores.