Quién es Pelayo Sánchez, el primer ganador de etapa español en el Giro de Italia en cinco años

Asturias es cuna, históricamente, de buenos ciclistas. Samuel Sánchez fue campeón olímpico en Pekín 2008, a la par que segundo en el Tour de Francia de 2010 y en la Vuelta a España de 2009. José Manuel Fuente ganó LaVuelta en 1972 y 1974 y fue el subcampeón tanto del Tour de 1973 como del Giro de Italia de 1972. José Luis Rubiera fue sexto en LaVuelta de 1999 y octavo en el Giro de 2000. Ahora, Pelayo Sánchez, imbuido del espíritu de estos grandes campeones, se ha convertido en el primer español en ganar una etapa del Giro en cinco años.

El corredor del Movistar Team, al que ha llegado este mismo 2024, ha sido el mejor este jueves en la sexta jornada de la grande transalpina, entre Torre del Lago Puccini (Viareggio) y Rapolano Terme (Toscana). A sus 24 años, el de Tellego consiguió colarse en la fuga que definió el día e imponerse en el sprint a Julian Alaphilippe y Lucas Plapp. Cuando todo parecía perdido para Sánchez, al tener problemas en una rotonda, se rehizo para jugarse el alirón y acabar cantándolo.

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“Ganar en una grande es un sueño. El año pasado estuve cerca en LaVuelta y tenía claro que lo iba a intentar, pero no podía imaginar que llegaría tan pronto. Es una locura”, acertaba a decir tras sobrevivir al sterrato. Se trata de la tercera victoria como profesional de su vida, tras las alcanzadas en la Vuelta de Asturias de 2023 y el Trofeo Pollença-Port d’Andratx de este año. En la general de este Giro, Tadej Pogacar continúa al frente, con 46 segundos de ventaja sobre Geraint Thomas y 47 sobre Daniel Felipe Martínez. De momento, todo se mantiene prácticamente igual en la lucha por la maglia rosa. Qué duda cabe de que esta edición ya será una inolvidable para Pelayo.

Cuando era júnior, Sánchez no lo hizo nada mal en el MMR Academy apadrinado por su tocayo de apellido, acabando de explotar en el Gomur-Cantabria Infinita, ya como sub-23. Su buen concurso allí en 2020 llevó a que ascendiese al profesionalismo de la mano del Burgos-BH en 2021, con un estreno en LaVuelta donde hizo gala de unas piernas más que interesantes: todavía se recuerda cómo salió a por Michael Storer en el Gamoniteiru. La pena es que su progresión se cortó en 2022, cuando la salud, con una mononucleosis incluida, le jugó malas pasadas y le impidió brillar.

Sí lo haría en 2023, con un segundo lugar en el Trofeo Pollença en el que se ha impuesto este curso y su primer triunfo entre los profesionales en la Vuelta de su Asturias natal, llevándose la última etapa en Oviedo. Además, estuvo en el podio del GP Beiras y acarició la victoria de etapa en LaVuelta, quedando tercero en Guadarrama, detrás de dos monstruos como Wout Poels y Remco Evenepoel, y sexto en la Laguna Negra de Vinuesa. Por no hablar de la sapiencia de Pelayo en las etapas de la ronda española que pasaron por suelo asturiano.

“Desde el inicio del Giro, intenté ahorrar energía porque sabía que no estaba en forma para estar delante los primeros días. Así que intenté ahorrar energía para hoy y podría estar en la escapada, pero nunca me imaginé ganar la etapa”, desvelaba Sánchez después de la gesta.

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“Estaba en la fuga, así que intenté estar tranquilo y eliminar a algunos corredores. Al final, estaba con Plapp y Alaphilippe, así que intenté colaborar con ellos. También intenté dejarlos atrás, pero me fue imposible. Lo intenté en el sprint y afortunadamente al final fui el más rápido”, se vanaglorió. Ya son 112 las victorias de etapa españolas en el Giro, que no había visto a uno de los nuestros en el primer cajón del podio desde 2019 hasta hoy.