La rajada de Roy Keane sobre Haaland: “Es como un futbolista de cuarta división…”

El reciente empate sin goles entre el Manchester City y el Arsenal ha suscitado diversas reacciones en la prensa británica, dejando a varios jugadores bajo el escrutinio público, entre ellos, Erling Haaland. El delantero noruego, conocido por su habitual eficacia goleadora, acumula ya cinco partidos sin marcar, tras no lograr tampoco anotar en el crucial encuentro disputado en el Etihad Stadium por la Premier League. Durante los 90 minutos que estuvo en el campo, Haaland dispuso de cuatro ocasiones, dos de ellas dirigidas a portería, y completó el 64% de sus pases, lo que lo convirtió en uno de los jugadores con menor participación en el juego de su equipo.

Esta falta de impacto no pasó desapercibida para Roy Keane, exjugador del Manchester United y actual analista para Sky Sports, quien no dudó en criticar duramente la actuación del delantero del Manchester City. “El nivel de su juego en general es muy pobre, y no solo hoy. En términos de goles, es el mejor del mundo, pero su juego general es muy pobre. Es casi como un jugador de League Two (cuarta categoría del fútbol inglés)”, declaró la leyenda del Manchester United y analista televisivo.

Cabe destacar que Keane tiene un pasado conflictivo con la familia de Haaland, ya que estuvo involucrado en una lesión grave de Alf-Inge Haaland, padre de Erling, durante su carrera como jugador. Esta lesión forzó al entonces futbolista a retirarse, algo sobre lo que Keane ha admitido en el pasado que no lamenta, llegando a describirlo como una venganza premeditada.

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El incidente entre Roy Keane y Alf-Inge Haaland ocurrió durante un partido de la Premier League en abril de 2001, cuando Keane realizó una entrada extremadamente dura sobre Haaland, en lo que terminaría afectando significativamente a su carrera como futbolista. Sin embargo, esto no fue fruto de la ‘casualidad’. La rivalidad entre ambos se remontaba a 1997, cuando Haaland acusó al irlandés de fingir una lesión en una entrada realizada por el noruego, cuya lesión finalmente mantuvo fuera a Keane durante un largo período de tiempo.

Así, lo que Keane definió como una “venganza premeditada” ocurrió cuatro años después. La entrada fue tan peligrosa que resultó en una tarjeta roja directa para Keane. Aunque Alf-Inge Haaland intentó continuar su carrera, las lesiones derivadas de este incidente limitaron su tiempo en el campo, llevándolo a retirarse antes de lo deseado.

En su autobiografía, publicada posteriormente, Keane admitió que la entrada había sido un acto premeditado de venganza, generando aún más controversia y críticas hacia su conducta. A raíz de sus comentarios en el libro, Keane recibió una suspensión y una multa significativa por parte de la FA (Asociación de Fútbol de Inglaterra) por traer el juego en descrédito. Este incidente es recordado como uno de los peores momentos de la Premier League y ha dejado una clara rivalidad en la relación entre Roy Keane y la familia Haaland.