Luis Font, uno de los miembros fundadores del icónico grupo español Locomía, atraviesa una de las etapas más difíciles de su vida. Tras años de vivir de la música y del recuerdo del fenómeno que representó la banda en los años 80 y 90, hoy enfrenta la crudeza de la precariedad extrema. Con 61 años, Font ha revelado que vive en la calle, durmiendo en bancos de parques y usando baños públicos para asearse, mientras trata de afrontar la situación con dignidad.
La vida de Font cambió drásticamente después de una operación de menisco que lo dejó sin fuerzas para seguir ganándose la vida como músico callejero. “Este banco es el resultado de cómo me veo, en la calle. He tenido un problema en el menisco y no tenía fuerzas para seguir cantando en el metro. Sin entrar mucho en detalle, me he visto obligado a vivir en la calle y a aceptarlo con dignidad”, confesó en declaraciones a Socialité. A pesar de las dificultades, Font mantiene el sentido del humor que lo caracterizó durante su carrera artística. Sin embargo, su realidad diaria está marcada por la supervivencia básica, con lo poco que tiene destinado exclusivamente para comida.
La complicada relación con su hermano Xavier Font, también fundador de Locomía, ha sido otro factor que ha afectado su bienestar. Luis explicó que tomó la decisión de distanciarse de él por su propia salud mental. “Durante 30 años he intentado estar al lado de una persona que es complicada y compleja. Por salud mental decidí apartarme de él”, afirmaba en una entrevista con El Español. La historia de Locomía, famosa por su mezcla de pop, electrónica y una estética extravagante de abanicos y trajes llamativos, ha estado marcada por controversias y tragedias. Los problemas legales, la gestión del grupo y los conflictos internos llevaron a rupturas familiares y distanciamiento. La vida personal de los miembros del grupo también se ha visto afectada por la inestabilidad que siguió al éxito inicial.
La “maldición” de Locomía
A pesar de las adversidades, Luis Font se niega a rendirse. Ha pedido a sus seguidores que no lo compadezcan, asegurando que se mantiene de buen humor y optimista. “Estoy bien, no quiero mensajes dramáticos, no me gustan los dramas. Todo lo que hay en esta vida es un aprendizaje, y yo estoy en ese camino”, expresó a través de redes sociales. Font, quien fue parte del auge y el declive de uno de los fenómenos musicales más peculiares de España, sigue creyendo en la posibilidad de un cambio positivo en su vida. Su situación es un recordatorio de las dificultades que enfrentan muchos artistas que, tras haber gozado de fama, se ven empujados a la precariedad cuando la industria los deja atrás.
La historia de Locomía está llena de altibajos y pérdidas trágicas, muchas de ellas plasmadas en la gran pantalla con la película Disco, Ibiza, Locomía, en la que Javier Morgade daba vida Luis Font. Varias de las figuras clave del grupo han fallecido, incluyendo a Santos Blanco, quien murió en 2018 a los 46 años. La banda, que combinó música, moda y coreografía en una propuesta única, fue uno de los símbolos más llamativos de la movida de los años 80 y 90 en España. Sin embargo, el brillo del éxito se apagó rápidamente. Los conflictos por los derechos del nombre, las tensiones internas y los cambios de formación empañaron el legado del grupo. Xavier Font, quien estuvo a cargo de la dirección creativa, ha sido una figura polémica dentro y fuera del escenario. Luis, por su parte, ha preferido mantenerse alejado de las disputas públicas, aunque ha acabado en la crítica situación que vive ahora.