El mito roto de la maternidad es un tema que ha sido abordado por infinidad de autoras. Sigue siendo abordado, eso sí, como un tabú: decir que tu recién nacido te está volviendo loca es un enunciado altamente inflamable. Rachel Cusk fue una de las primeras escritoras que decidió volcar su experiencia como madre primeriza en Un trabajo para toda la vida (Libros del Asteroide, 2022). En este ejercicio honesto de escritura, la británica no quiso esconder los aspectos menos agradables del embarazo, parto y posterior crianza del bebé.
Desesperación, falta de sueño y una sensación de que la existencia propia se desvanece conforme se crea la del hijo. Ampliamente criticada por la sociedad británica del momento, el libro de Cusk cayó en la siempre transitada categoría de las ‘malas madres’: ese grupo de humanas que abordan los espacios más oscuros de la maternidad. Ella no ha sido la única. Tampoco la primera. Las relaciones filio-parentales se abordan sin tapujos entre páginas. Lo hizo recientemente Blanca Lacasa con Las hijas horribles (Libros del K.O., 2023) y hace unos años Rachel Yoder en Canina (Blackie Books, 2021).
Precisamente este último consiguió aunar a lectores afincados en otros géneros por la capacidad satírica que la autora, que debutó con esta novela, imprimió en sus párrafos. En ella se narra la historia de una mujer que comienza a sentir una transformación mental y corporal tras dar a luz. La protagonista de su historia está desbordada: pese a renunciar a su trabajo como galerista de arte, el tiempo se escurre entre el cuidado de su hijo de dos años y la casa. Su marido, mientras, se enfoca en el trabajo.
El agotamiento generalizado que sufre la lleva a pensar que ha perdido la cabeza. Una mata de pelo rasposo comienza a crecerle en la nuca, los colmillos parecen estar afilándose y padece un hambre voraz. De esta forma, y tirando de los elementos fabulosos y fantásticos que acompañan a la narración, Yoder aborda la maternidad desde la transformación profunda y crítica, sin clichés que tienden a romantizar la experiencia. Su debut literario nació de una frustración propia al convertirse en madre. Canina (Nightbitch en inglés) es el resultado de las vivencias de la propia Yoder, que narró sus transformaciones personales y profesionales tras dar a luz.
Después de dos años sin escribir, la autora estadounidense encontró inspiración bajo su propio techo. Yoder comenzó a dar forma a Canina sin preocuparse en exceso por su extrañeza, ya que lo escribió “para sí misma”, aunque sí le preocupaba que la premisa no proporcionara suficiente sustancia para un libro de la extensión que quería escribir. El realismo mágico de la novela, así como su afilada forma de describir los pasajes más desagradables de la maternidad, lo convirtieron en el mejor libro de su año para reputadas publicaciones culturales como Esquire y Vulture. También fue finalista del premio PEN/Hemingway Award, entre otros.
Su éxito ha permitido que la historia se haya trasladado a la gran pantalla de la mano de Marielle Heller (directora de ¿Podrás perdonarme algún día?) y Amy Adams, que interpreta a la protagonista del relato. Aunque en un primer momento se planteó como una adaptación que iría directamente a plataformas (Hulu en el caso de Estados Unidos), se acabó presentando en el Toronto International Film Festival (TIFF) y estrenando en las salas de cine el pasado 6 de diciembre de la mano de Searchlight Pictures.
Al igual que ha ocurrido en Latinoamérica, en España la película no pasará por la cartelera y se estrenará directamente en Disney+. Estará disponible en el catálogo de la plataforma a partir del 24 de enero, donde es uno de los lanzamientos más esperados del año y coincidiendo con la nominación de Adams en los Globos de Oro (celebrados en la madrugada de este lunes).