3,2,1... El juego del calamar fue algo más que un simple fenómeno audiovisual. En un renacimiento tras la pandemia, la serie surcoreana supo captar la atención de todo el mundo con una macabra ficción sobre un juego que ponía al límite a sus participantes. Tres años después de su estreno en Netflix (y de que millones de personas se hayan inspirado en ella para sus disfraces de Halloween), la segunda temporada de la serie creada por Hwang Dong-hyuk ya se puede disfrutar en el gigante del streaming.
Los nuevos episodios han aterrizado en la plataforma coincidiendo con el periodo navideño y las redes sociales se han llenado de preguntas, análisis y comentarios sobre la segunda etapa del juego mortal que conquistó a medio planeta. En una entrevista con la BBC, Dong-hyuk desveló los motivos que le habían llevado a querer ampliar una historia que parecía finita, pero de la que todavía quedaba mucho por contar. “Aunque la primera temporada fue un gran éxito mundial, sinceramente no gané mucho con ella. Así que hacer la segunda temporada me ayudará a compensar el éxito de la primera”, explicó, añadiendo que el relato “no ha terminado del todo”. Con rumores que apuntan a una tercera temporada, los espectadores han comenzado a desengranar las personalidades de los nuevos participantes y actores.
Uno de los protagonistas de la segunda temporada de El juego del calamar es Park Sung-hoon, que interpreta a Hyun-j. Se trata de un hombre cisgénero interpretando a una mujer transexual, una realidad que ha generado muchas preguntas y cuestionamiento entre los seguidores de la ficción. Hyun-j es uno de los personajes más destacados de los nuevos capítulos: se trata de una mujer trans que es una antigua soldado de las fuerzas especiales y que decide entrar en el juego para ganar dinero y poder, así, completar su cirugía de reasignación de género. La jugadora 120, feroz y compasiva durante las sanguinarias pruebas, se convirtió rápidamente en uno de los personajes favoritos de la audiencia, pero muchos se sorprendieron al comprobar que ésta estaba interpretada por un hombre. Tras el revuelo que se ha generado, Hwang Dong-hyuk ha querido desvelar el “desgarrador” motivo por el cual no contó con una mujer trans para dicho rol.
“Desde el primer momento en que empecé a crear el personaje de Hyun-ju, preví que surgirían este tipo de discusiones”, dijo el creador de El juego del calamar a TVGuide. “Al principio pensé en hacer un casting auténtico de un actor trans. Cuando estuvimos investigando en Corea nos dimos cuenta de que casi no hay actores que sean abiertamente trans, y mucho menos abiertamente gays, porque por desgracia en la sociedad coreana actual, la comunidad LGBTQ sigue estando bastante marginada y más desatendida, lo cual es desgarrador”, admite.
Hwang añadió que era “casi imposible encontrar a alguien a quien pudiéramos dar un papel auténtico” como mujer trans. “Y eso nos llevó a decidirnos por Sung-hoon”, dijo. “He observado su trabajo [interpretando muchos papeles de homosexuales en proyectos coreanos] desde su debut, y tenía plena confianza de que él sería la persona adecuada en cuanto a talento para encarnar a este personaje”. Aunque no de la forma que le hubiese gustado, el creador admite que su deseo era poder representar a dicha comunidad de una forma u otra, sobre todo por la escasa representación con la que cuentan las personas transexuales en las series coreanas: “Aún no está completamente aceptado”.
“Veo a las personas que vienen a participar en los juegos como gente que suele estar marginada o desatendida de la sociedad, y no sólo económicamente hablando”, dijo Hwang en una entrevista para Decider, explicando el por qué de sus personajes. “En la primera temporada, el personaje representativo de eso era Ali, que era un extranjero que trabajaba en Corea, que es uno de los grupos minoritarios más representativos del país... Hoy en día, por desgracia, en la sociedad coreana, la minoría de género es un grupo que no está tan aceptado dentro de la sociedad, por eso creé el personaje de Hyun-ju”, contó.
El juego del calamar, que destacó en 2021 por su combinación única de juegos infantiles con consecuencias mortales, adoptó temáticas universales como la desesperación económica y la lucha por la supervivencia, resonando entre audiencias de diversas culturas. Esta capacidad de conectar con el público ha llevado a la serie a recibir múltiples premios y consolidarse como un referente en la industria del entretenimiento.