Ya se sabe que las películas de Ridley Scott están llenas de grandes desafíos. En su última película no iba a ser menos, y Gladiator II se puede jactar de tener algunas de las secuencias más atrevidas de este 2024: la batalla inicial, la pelea con monos, la batalla naval en el Coliseo... y mucho más. En definitiva, estar en una película del autor de Blade Runner y Alien, el octavo pasajero es sinónimo de poner tu integridad física y vida en peligro, y eso es exactamente lo que le sucedió a los protagonistas de la película, Denzel Washington y Paul Mescal.
Pero claro, no todos pueden ser como Tom Cruise, a quien ese riesgo parece incentivarle con cada película que realiza. Los actores de esta épica película de romanos se encontraron con un complejo entramado que incluía la misma arena que la de la película original, así como varios decorados que recreaban los alrededores de Roma y las inmediaciones del propio Coliseo. El rodaje de la película, que se fue encareciendo con el tiempo, entrañaba también algunos peligros, y no solo por contar con animales o querer llenar el coliseo de agua para la naumaquia. También se produjo algún incidente que puso en peligro la vida de los actores, pero sobre todo de algunos miemrbos del equipo.
“Mientras se filmaba una secuencia de acrobacias planificada en el set de Gladiator II, ocurrió un accidente en el cual varios miembros del equipo sufrieron lesiones que no pusieron en peligro su vida”, declaraba la compañía Paramount Pictures en un escueto comunicado allá por 2023, cuando el rodaje se estaba desarrollando en Marruecos. Al parecer, lo que sucedió fue que se formó una bola de fuego que afectó hasta a seis miembros del reparto, en una horrosa escena en la que también estaban presentes Paul Mescal y Denzel Washington, quienes no resultaron heridos. “Fue aterrador: una enorme bola de fuego salió volando y alcanzó a varios miembros del equipo. En años de rodaje, nunca había visto un accidente tan aterrador”.
Sobreviviendo al desastre
A pesar de todo, tanto los actores como los miembros del equipo salieron con vida de este episodio del rodaje y pudieron continuar rodando. No fue el único contratiempo, porque también tuvieron problemas con el mono Dondo -la mascota del emperador Caracalla que se acaba convirtiendo en primer cónsul- o con los tiempos de rodaje, que tuvieron que dinamizar para filmarlo todo con la mayor brevedad. Al final, el director asegura que pudo rodar toda la película en unos 50 días, aunque hay quien asegura que lo hizo a costa de escatimar en algunos aspectos.
“Es realmente vago. Ahora usa los elementos CGI para ordenar, dejando las cosas en la toma, las cámaras en la toma, los micrófonos en la toma, pedazos del decorado colgando...”, comentaba John Mathieson, director de fogografía de Gladiator II y un habitual en la filmografía de Scott. “Es bastante impaciente, le gusta conseguir todo lo que quiere rápido, y eso no es muy bueno para la fotografía. Sólo se puede iluminar desde un ángulo”, añadía, en una película que a pesar de todo está conquistando a la taquilla y sigue en lo más alto.