Ha sido uno de los fenómenos cinematográficos desde su estreno el pasado mes de septiembre. Más de 200.000 mil espectadores ya han disfrutado de La virgen roja, la película de Paula Ortiz, en las salas de cine de nuestro país. Ahora, la cinta que ahonda en la historia de la joven Hildegart Rodríguez, pionera feminista en la España de comienzos de siglo XX, llega a Prime Video para encandilar a la audiencia global. La plataforma ha anunciado este jueves que el filme llegará a su catálogo el próximo 5 de diciembre.
Protagonizada por Nawja Nimri (La casa de papel, Vis a vis, Quién te cantará) y Alba Planas (Skam España), La virgen roja se basará en la vida real de Hildegart Rodríguez Carballeira, la española nacida en 1914 considerada una niña prodigio y que tuvo una exigente madre que la quiso convertir en un modelo de mujer del futuro. A los 11 años, Hildegart ya daba conferencias sobre feminismo y sexualidad, hablaba sobre la prostitución o sobre los anticonceptivos.
A sus 18 años, Hildegart comienza a experimentar la libertad y conoce a Abel Velilla, quien le ayuda a explorar un nuevo mundo emocional y desmarcarse del férreo nido materno. La joven también pasó a la historia por su latente activismo político y su inteligencia, pero no todo fue un jardín de rosas para ella.
Detrás de esa excelencia estaba la figura de una madre implacable, Aurora Rodríguez, que será interpretada por Nimri. Aurora teme perder el control sobre su hija y hace todo lo posible por impedir que Hildegart se aleje. El rol de la matriarca ya fue encarnado por Amparo Soler Leal en Mi hija Hildegart (1977), dirigida por Fernando Fernán Gómez y coescrita junto a Rafael Azcona. Aixa Villagrán (La chica de nieve, En los márgenes), Patrick Criado (Bajo cero, Antidisturbios) y Pepe Viyuela (García y García, La caza. Monteperdido) completan el reparto de un drama histórico que mezcla romance y thriller.
“Escribía cosas que siguen sonando a día de hoy”
Alba Planas (Madrid, 2000) habló con Infobae España sobre lo que supuso para ella, a nivel interpretativo, meterse en la piel de Hildegart. “Es un proyecto que me fascina, me encanta hablar de la película porque se generan debates, incluso me pregunto cosas que durante el rodaje no me había cuestionado”, indicó a este medio.
“El punto de partida fue lo más difícil de de preparar”, pues tuvo que meterse en la piel de una chica de 17 años “que aparentaba 40″, con un porte y estar poco adecuados para la efervescencia propia de la adolescencia. “Es una joven que tiene un nivel de pensamiento progresista inconcebible para la época, pero que a la vez no tiene ningún tipo de experiencia vital”, de ahí que resultase un reto darle forma a su constreñida personalidad.
A la actriz le “enfada” que nadie de su generación la conociese, incluida ella. “Es fuerte que casi nadie sepa quién fue”, admite. Planas frunce el ceño ligeramente, dejando clara su postura sobre el silenciamiento de Hildegart en los libros escolares e históricos. “Escribía cosas que siguen sonando a día de hoy”: sexo, eugenesia, genitales femeninos o incluso el derecho al aborto libre.
En La virgen roja, el proyecto Hildegart adquiere una narrativa oscura, pero doméstica, casi sustentada por la subyacente ternura del nexo entre ambas. Una relación entre madre e hija que va más allá de los estándares caóticos que se plasman en las exitosas novelas de Vivian Gornick. La obsesión de Aurora por conformar el ideal de mujer del futuro acabó gestando la trágica muerte de su única hija.