El escalofriante caso real que hay detrás de ‘La mujer del momento’, una de las películas del año

Anna Kendrick dirige y protagoniza la historia de un homicida múltiple conocido como ‘el asesino del juego de citas’

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Basada en una historia real que supera cualquier ficción, 'La mujer del momento' explora los inquietantes sucesos que envolvieron a Rodney Alcalá y Cheryl Bradshaw.

Los asesinos en serie siempre han sido un gran material para películas y series. Al horror y el morbo que despiertan sus figuras, hay además una curiosidad por ver cómo ciertas personas pudieron cometer actos tan macabras y funestos. Así, en los últimos años hemos podido ver varias ediciones de la saga Monstruos, que retrató primero a Jeffrey Dahmer y más tarde a los hermanos Menéndez, u horrorizarnos con Ted Bundy: En la mente del asesino o El estrangulador de Boston.

Todos estos casos fueron muy mediáticos. Periódicos, radios y televisiones se hicieron eco de los hechos, ya fuera durante los asesinatos o ya durante el juicio. Sin embargo, en ninguno de estos casos el asesino se dejó ver en televisión por millones de espectadores en la misma época en la que cometía sus crímenes, algo que si ocurrió con Rodney Alcalá, conocido como ‘el asesino del juego de citas’ y protagonista de una de las películas del año: La mujer del momento.

El mejor candidato de todos

Los programas de citas a ciegas siempre han tenido mucho éxito en televisión. En Estados Unidos, uno de los más conocidos fue The Dating Game. En este peculiar programa, una mujer soltera hacía preguntas a tres candidatos a los que no podía ver -el público sí que les veía-. Finalmente, la chica debía tomar una decisión y quedarse con uno de los tres, con el que podría tener una cita. De este modo, fue en 1978 cuando Rodney Alcalá fue una de esas parejas potenciales. Y no solo eso, sino que además, ganó.

Pero, ¿quién es Rodney Alcalá? Fallecido en 2021 a los 77 años, este hombre pasó gran parte de su vida en la cárcel debido a los asesinatos probados de ocho mujeres, cometidos en la misma época en la que se grabó el show. Además, se sospecha que Alcalá podría haber tenido muchas más víctimas, llegando las sospechas a calcular que alrededor de un centenar de mujeres fueron asesinadas por él. Por suerte, Cheryl Bradshaw, la concursante de The Dating Game, decidió finalmente no salir con el hombre al que había escogido debido, supuestamente, a una siniestra conversación que mantuvieron justo después de grabar el programa.

Anna Kendrick es Cheryl en 'La mujer del momento'. (Leah Gallo/Netflix © 2024)
Anna Kendrick es Cheryl en 'La mujer del momento'. (Leah Gallo/Netflix © 2024)

Anna Kendrick se estrena detrás de las cámaras

De este modo, La mujer del momento es la adaptación de lo que ocurrió durante todo ese ‘juego de citas’, intercalándose también con numerosas escenas en las que podemos ver cómo Alcalá se hacía pasar por fotógrafo artístico para quedar con mujeres a las que posteriormente asesinaba. Una serie de secuencias con una sorprendente puesta en escena por parte de la directora de la película, Anna Kendrick, que asume por primera vez los mandos de la dirección.

De hecho, parte de la crítica se ha sorprendido ante la calidad del largometraje que actualmente se puede ver en Prime Video. No tanto por el buen hacer de Kendrick, sino por el cambio de registro que ha supuesto para su carrera. Esta actriz saltó a la fama tras su papel en la saga Crepúsculo, aunque quizá su papel más recordado sea el de Beca en las películas de Dando la nota.

“Puedo entender por qué una película que comienza con una escena violenta realmente no parecería ser de mi gusto”, se pronunció Kendrick en una entrevista con el medio británico de la BBC. “Pero siento que he pasado por experiencias con las que puedo identificarme con estar con otra persona y de repente descubrir que estás con alguien que no es seguro para ti”. La película, con muy buenas críticas tras su estreno, incluye una escena que no ocurrió en la realidad, en la que Cheryl finalmente sí queda con Rodney Alcalá. Un encuentro en el que todo acaba saltando por los aires.

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