Se ha convertido en la persona más joven en recibir este galardón junto con Antonio Banderas, precisamente ambos pertenecientes a la misma generación. Tiene 55 años y casi cuarenta en la profesión, así que prácticamente toda su vida ha estado relacionada con la interpretación.
Aita Sánchez-Gijón es una de las mejores actrices de nuestra cinematografía de manera incuestionable. Ha trabajado con directores como Gonzalo Suárez (Remando al viento), Fernando Fernán-Gómez (El mar y el viento), Pilar Miró (El pájaro de la felicidad), Bigas Luna (La camarera del Titanic), Vicente Aranda (Celos) o Pedro Almodóvar (Madres paralelas). En definitiva, con buena parte de los grandes directores de la historia del cine de nuestro país.
Prestigio dentro y fuera de nuestras fronteras
También ha participado en producciones de carácter internacional como Un paseo por las nubes, junto a Keanu Reeves, El maquinista, con Christian Bale o Bosque de sombras, en la que compartió protagonismo con Gary Oldman o Paddy Considine.
Nunca había ganado un Goya y solo estuvo nominada en una ocasión, por su papel en Madres paralelas, de Pedro Almodóvar. En 1999 conseguiría la Concha de Plata del Festival de San Sebastián por su papel en Volavérunt, de Bigas Luna.
No ha habido género que se le haya resistido, de hecho uno de los primeros papeles en los que destacó fue en Bajarse al moro, de Fernando Colomo, una de las comedias más emblemáticas de finales de los años ochenta. Después continuó explorando el humor en Boca a boca o El amor perjudica seriamente la salud, dos de los éxitos del cine español de la época de la mano de Manuel Gómez-Pereira.
Versatilidad en cine y en series míticas: desde ‘La Regenta’ a ‘Velvet’
Su versatilidad siempre la ha caracterizado, pero desde sus inicios ha amado el teatro por encima de todo. Por eso, ha comentado que, precisamente por eso, no quiso quedarse en Hollywood después de hacer Un paseo por las nubes. Ella tenía una compañía y sabía que su sitio estaba en nuestro país, razón por la que no luchó por hacerse un hueco en esa industria encarnizada.
La actriz siempre ha participado de en series de televisión desde sus inicios hasta la actualidad, desde Segunda enseñanza, de Pedro Masó en 1986 a Respira, la serie de Netflix que se estrenó el pasado agosto. Ha pasado por Velvet, uno de los primeros buques insignia de la plataforma, pero también encarnó a la protagonista de La Regenta, la gran novela de Fernando ‘Alas’ Clarín que dirigió Fernando Méndez-Leite que, precisamente ha sido el encargado de anunciar hoy este galardón en su faceta como director de la Academia de Cine, una labor que también ejerció la propia Aitana Sánchez-Gijón durante dos años (1998-2000), cuando sustituyó al desaparecido José Luis Borau.
Nació en un entorno académico y profundamente cultural, ya que fue hija del catedrático en Historia Ángel Sánchez-Gijón Martínez y de una profesora italiana de Matemáticas llamada Fiorella De Angelis. Su nombre fue un homenaje a su madrina, Aitana Alberti, hija de Rafael Alberti (quien incluso le dedicó un poema) y es prima de Pablo Carbonell.