Este sábado 12 de octubre ha fallecido a los 94 años Josep Tomàs Cabot, reconocido escritor, historiador y periodista manresano. La noticia ha sido confirmada por la Associació Memòria i Història de Manresa a través de un comunicado en el que destacan la vasta trayectoria de Cabot y su gran contribución a la cultura y la historia catalana.
Nacido en Manresa (Barcelona) el 27 de agosto de 1930, Josep Tomàs Cabot combinó su vida profesional entre la medicina, la literatura y el periodismo, dejando un legado de gran influencia en diversas áreas. Aunque se licenció en Medicina, fue en las letras donde encontró su verdadera vocación, destacándose como un prolífico escritor de novelas y un referente en la divulgación histórica.
En el ámbito literario, Cabot publicó numerosas novelas que le otorgaron reconocimiento en el panorama literario catalán y español. Entre sus obras más conocidas destaca El piquete, ganadora del prestigioso Premio Sésamo en 1959. Esta novela le abrió las puertas de la narrativa y le permitió continuar una prolífica producción literaria que incluyó títulos como La reducción (1963), Cántico en la noche (1969), Bona nit, senyor Hoste! (1985), L’inesperat arcàngel del matí (1986), Giravolt dels dies (1986), y L’últim experiment (1994), entre otros.
Su estilo literario, impregnado de un profundo humanismo, trataba temas de gran relevancia social y filosófica, abordando la complejidad de la condición humana en un contexto de cambios históricos y políticos. Su capacidad para entrelazar la narrativa con sus amplios conocimientos históricos le permitió destacar entre los escritores de su generación.
Un historiador comprometido
Además de su carrera literaria, Josep Tomàs Cabot fue un destacado historiador. Su conocimiento profundo sobre la Historia Moderna y Contemporánea de España le permitió ser profesor en la Universitat de Barcelona entre 1974 y 1992. Durante esos años, su labor académica estuvo marcada por un enfoque riguroso y una clara vocación pedagógica, lo que le ganó el respeto y el reconocimiento de estudiantes y colegas.
Cabot fue también director de la revista Historia y Vida entre 1991 y 1997, un espacio de divulgación histórica que ha tenido una notable influencia en la comprensión del pasado en España. Bajo su dirección, la revista alcanzó importantes cuotas de popularidad, combinando una rigurosa investigación histórica con un estilo accesible para el público general. En su faceta como divulgador, contribuyó con artículos para la Gran Enciclopèdia Catalana, dejando un importante legado en la documentación y divulgación del conocimiento histórico en Cataluña. Su labor fue esencial en la creación de obras de referencia que siguen siendo consultadas hoy en día por historiadores y estudiantes.
A lo largo de su vida, Josep Tomàs Cabot recibió varios reconocimientos por su trabajo. En 2019, el Col·legi de Periodistes de Catalunya le concedió el Premi d’Honor de la Demarcació Catalunya Central, destacando su “vida dedicada a las letras” y su importante contribución al periodismo y la literatura. Este reconocimiento fue uno de los muchos tributos que recibió a lo largo de su carrera por su dedicación incansable a la cultura, la historia y el periodismo.
El Col·legi de Periodistes ha emitido un comunicado en el que lamenta profundamente la pérdida de este importante referente, recordando su trayectoria en la literatura y el periodismo, y destacando el impacto que dejó en las generaciones venideras. “Cabot fue un ejemplo de compromiso con la historia, con la verdad y con la cultura. Su legado es inmenso y su figura será recordada por siempre”, concluye el comunicado.
Una vida dedicada a las letras
Aunque Josep Tomàs Cabot fue un hombre de múltiples talentos, su vida estuvo siempre vinculada a las letras. Como periodista, historiador y escritor, dejó una huella imborrable en la cultura catalana y en la historia del periodismo. Su capacidad para compaginar sus conocimientos médicos con su pasión por la historia y la literatura le permitió desarrollar una carrera que abarcaba múltiples disciplinas. Cabot se destacó por su habilidad para comunicar de manera clara y accesible los complejos hechos históricos, tanto en sus artículos como en sus clases y ensayos. Su compromiso con la verdad histórica y su capacidad de análisis crítico lo convirtieron en una figura indispensable en el ámbito de la divulgación.
Con la muerte de Josep Tomàs Cabot, Cataluña pierde a uno de sus más grandes intelectuales. Su legado, sin embargo, perdurará a través de sus obras literarias, sus estudios históricos y el impacto que tuvo en la cultura y el periodismo catalán. A sus 94 años, Cabot deja un vacío difícil de llenar, pero también un vasto legado que continuará inspirando a futuras generaciones de escritores, historiadores y periodistas.
(Con información de Europa Press)