Stephen King vendió los derechos de la historia por un dólar, Tom Hanks la rechazó y ahora es una película de culto: ‘Cadena perpetua’ cumple 30 años

La película protagonizada por Morgan Freeman y Tim Robbins fue nominada a los Oscar y ha pervivido en la memoria de millones de espectadores tanto tiempo después

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Imagen de 'Cadena perpetua'
Imagen de 'Cadena perpetua'

Cadena perpetua (The Shawshank Redemption), dirigida por Frank Darabont y basada en una obra de Stephen King, es considerada una de las mejores películas de la historia del cine. Estrenada en 1994, su impacto cultural sigue siendo profundo, y con el paso de los años, se ha ido convirtiendo en un filme de referencia para muchos cinéfilos. Ahora cumple 30 años y es momento de recordarla como se merece.

La película cuenta la historia Andrew ‘Andy’ Dufresne (Tim Robbins), un hombre acusado del asesinato de su mujer y que es llevado a la prisión de Shawshank a cumplir condena. Allí se hace amigo de Red (Morgan Freeman), uno de los capos de la mafia de los sobornos pero también un hombre en el que se puede confiar y quien ve en Andy un nuevo amigo. La inocencia y el buen hacer de Andy lo llevan a ganarse así la confianza de buena parte de la prisión. No solo de los prisioneros, también de los celadores e incluso del mismísimo alcaide, quien no duda en conferirle tareas de responsabilidad dentro de Shawshank. Sin embargo, llega un punto en que Andy se cansa de cumplir una condena por la que no es culpable, y es entnonces cuando comienza a preparar la que es una de las fugas más icónicas de la historia.

Con motivo de su 30 aniversario, repasamos algunas de sus curiosidades de una película que se puede encontrar en varias plataformas, desde Movistar+ a Netflix pasando por Max, y que está considerada como una de las mejores de la historia en webs como IMDB o FilmAffinity. Con estas anécdotas se pretende no solo recordar recordar y aportar contexto sobre la compleja producción de la película, sino también subrayar cómo pequeños detalles y dificultades en el set contribuyeron a crear una película que continúa siendo un referente en la cultura popular.

  • El brazo lesionado de Morgan Freeman: En la icónica escena donde Red (Morgan Freeman) y Andy Dufresne (Tim Robbins) conversan mientras juegan béisbol en el patio, Freeman tuvo que lanzar una pelota durante nueve horas para completar la toma. Aunque el actor no se quejó durante el rodaje, al día siguiente llegó al set con el brazo en cabestrillo debido a la fatiga muscular, un reflejo del compromiso físico que el rodaje demandaba.
  • El rechazo de Tom Hanks que aprovechó Tim Robbins: aunque es imposible imaginar la película sin otro actor protagonista que no sea Tim Robbins -al igual que sucede con Morgan Freeman-, lo cierto es que la primera opción para el papel de Andy no era otra que el gran Tom Hanks. Sin embargo, el actor lo tuvo que rechazar por otro papel que le había surgido ese mismo año y que le llevaría a ganar el Oscar: Forrest Gump.
  • El póster de Raquel Welch: uno de los elementos más simbólicos de la película es el póster de Raquel Welch que Andy Dufresne usa para cubrir el túnel por el cual finalmente escapa. Sin embargo, encontrar el póster adecuado no fue fácil. El equipo de producción pasó tiempo buscando una imagen que fuera lo suficientemente icónica y que también encajara en el periodo histórico en el que transcurre la película, logrando finalmente dar con una que cumpliera ambos requisitos.
  • El cuervo de Brooks y la Americane Humane Society: Brooks es uno de los presos más mayores de la presión, y es conocido por tener un cuervo. Sin embargo, tras las cámaras ese cuervo requería de la presencia en el rodaje la American Humane Society, una organización de bienestar animal que enviaba representantes diariamente para asegurarse de que el cuervo recibía un buen trato.
La huida con la lluvia,
La huida con la lluvia, una de las escenas más memorables del filme
  • El fracaso en taquilla que se convirtió en éxito de culto: aunque hoy es reconocida como una obra maestra, Cadena perpetua fue un fracaso en taquilla durante su estreno en 1994, recaudando bastante menos de lo esperado. Sin embargo, tras las nominaciones al Óscar y su lanzamiento en formato VHS, la película fue redescubierta por el público, convirtiéndose en un clásico de culto y en una de las películas más vistas en la televisión por cable en Estados Unidos.
  • La tensión con Tim Robbins en el rodaje de la escena de la lluvia: una de las escenas más famosas muestra a Andy Dufresne en medio de la lluvia tras escapar de la prisión, con los brazos extendidos en señal de libertad. Según cuenta Robbins, la escena se rodó en un tanque de agua sucia en una cantera y la lluvia era artificial. La primera vez que rodaron la escena, el sistema de lluvia falló, y Robbins tuvo que esperar en el tanque varios minutos hasta que se solucionara el problema. A pesar de las incomodidades, la escena terminó siendo una de las más icónicas del cine.
  • Derechos por un dólar: Stephen King, autor del relato original en el que se basa la película, vendió los derechos de la historia a Frank Darabont por solo un dólar. Este tipo de acuerdo, conocido como Dollar Babies, es una forma en que King permite a cineastas emergentes (o estudiante) adaptar su trabajo por un precio simbólico de un dólar. Con el éxito de la película, King recibió un cheque de 1.000 dólares, pero tuvo una idea genial. El escritor lo enmarcó y se lo mandó de vuelta a Darabont con un mensaje: “En caso de que alguna vez necesites dinero para la fianza, Con amor, Steve”.
  • La prisión real de Mansfield: el Reformatorio del Estado de Ohio, en Mansfield, donde se rodó gran parte de la película, tiene su propia historia. Este centro penitenciario real albergó a miles de reclusos antes de su cierre en 1990. El edificio fue elegido por su aspecto imponente y deteriorado, lo que contribuyó a la atmósfera de la película. Hoy en día es una atracción turística popular, con visitas guiadas que incluyen recorridos por los lugares donde se rodaron las escenas más emblemáticas del film.
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