Netflix está implementando una nueva estrategia para abordar el uso compartido de cuentas en España, una práctica que ha afectado sus ingresos. De esta forma, la plataforma permitirá a sus suscriptores añadir usuarios adicionales a sus cuentas por un coste de 4,95 euros, a cambio de aceptar publicidad en los contenidos bajo demanda. Esta medida representa un cambio significativo en la política de la empresa, que hasta ahora cobraba 5,99 euros adicionales al mes por cada usuario extra, independientemente del plan de suscripción.
Con la nueva estrategia, cualquier suscriptor podrá añadir usuarios adicionales por solo 4,95 euros mensuales, siempre y cuando acepten ver anuncios en los contenidos bajo demanda. Esto presenta una alternativa más económica para aquellos dispuestos a tolerar publicidad, en comparación con los 5,99 euros adicionales sin publicidad actualmente en vigor.
La medida de Netflix de probar esta nueva opción de suscripción con publicidad podría extenderse a otros países si los resultados en España son positivos. Este movimiento busca adaptarse a las necesidades de sus usuarios y encontrar formas de monetizar el uso compartido de cuentas. El uso compartido de cuentas ha sido un problema persistente para la compañía, ya que reduce el potencial de ingresos por suscriptor.
Actualmente, los planes de suscripción de Netflix en España varían:
- Plan Estándar con Publicidad: 5,99 euros mensuales. Ofrece contenidos limitados y anuncios.
- Plan Estándar sin Publicidad: 12,99 euros mensuales. Permite añadir un usuario extra no conviviente por un costo adicional de 5,99 euros mensuales.
- Plan Premium: 17,99 euros mensuales. Ofrece acceso a todo el catálogo sin publicidad y en Ultra HD.
En un comunicado de prensa, Netflix afirmó que esta iniciativa forma parte de un esfuerzo más amplio para diversificar sus fuentes de ingresos. Actualmente, la inclusión de publicidad en los planes de suscripción es una tendencia creciente en la industria del streaming. Esta estrategia ofrece una opción más asequible para los usuarios a cambio de aceptar anuncios, permitiendo a la compañía acceder a un segmento de mercado que podría estar buscando formas más económicas de consumir contenido de calidad.
Una tendencia creciente
La medida de Netflix se enmarca en un contexto en el que las plataformas de streaming están explorando diversas estrategias para aumentar sus ingresos y mantener su base de suscriptores. La inclusión de publicidad en los planes de suscripción es una tendencia que ha ganado terreno en la industria, ofreciendo una opción más asequible para los usuarios a cambio de aceptar anuncios. Otras plataformas de streaming también han comenzado a introducir planes con publicidad. Esto no solo permite mantener precios competitivos sino también atraer a una base de suscriptores más amplia, dispuesta a tolerar anuncios para acceder a contenidos premium.
Si la prueba en España es exitosa, es probable que Netflix implemente esta estrategia en otros mercados. La plataforma busca mantenerse competitiva en un entorno donde cada vez más servicios de streaming están disponibles y los consumidores tienen múltiples opciones. La combinación de publicidad con el uso compartido de cuentas podría ofrecer una solución viable para equilibrar las necesidades de los clientes con los objetivos de ingresos de la compañía.
Netflix está claramente en una fase de experimentación con nuevos modelos de suscripción que puedan satisfacer mejor a su audiencia. Este enfoque puede resultar en un modelo de negocio más flexible y adaptable, capaz de responder a los cambios en el comportamiento del consumidor y las dinámicas del mercado de entretenimiento digital.