Un logo inconfundible y unos diseños irrepetibles que medio mundo desea poseer. Cuando Taylor Swift apareció en su primer concierto de la gira The Eras Tour con un body rosa repleto de cristales de Swarovski para cantar Miss Americana & The Heartbreak Prince, la casa italiana de moda se encargó de dejar claro que dicha obra de ingeniería corría a cargo de su atelier. Meses después, no hay swiftie que no haya intentado replicar el intricado diseño en un maillot propio (y con lentejuelas y brillantes de dudosa procedencia).
Versace es algo más que una marca, una empresa de lujo o una pasarela en la que mostrar el arduo trabajo de meses. La marca creada por Gianni Versace (Reggio di Calabria, 1942 - Miami, 1997) en el año 1989 -que por aquel entonces se daba a conocer como Atelier Versace- convirtió la mitología y la idiosincrasia del sur de Italia en una combinación textil infalible. La cabeza de Medusa (personaje de la mitología griega capaz de convertir en piedra a sus detractores con tan sólo una mirada) era la imagen perfecta para una marca que buscaba, precisamente, generar ese impacto en el otro.
Estampados eclécticos, vestidos de malla, mucho oro, juegos geométricos y, ante todo, altas dosis de sensualidad. Tras haber triunfado en los años 80 con una moda parca en colores y funcional, el diseñador italiano forjó la identidad de una marca que, 27 años después de su muerte, sigue manteniendo la misma frescura e iconicidad. No en vano, sus musas no han parado de regenerarse. En los años 90 eran Naomi Campbell, Linda Evangelista o Claudia Schiffer, pero ya en manos de Donatella, el trono de las it girls se ha mantenido intacto con perfiles como Dua Lipa o la propia Swift.
Más allá de las piezas que conforman su armario de archivo y de la elocuencia que Gianni (y posteriormente su hermana) imprimó en cada una de sus colecciones, el Museo Nacional de Artes Decorativas recupera la figura de un pionero que conectó sus creaciones con la Historia. La exposición Gianni Versace. Frente al espejo se podrá visitar en el museo madrileño hasta el próximo 6 de octubre de forma totalmente gratuita. La exposición aborda las influencias históricas, artísticas y culturales que subyacen bajo las creaciones del calabrés y que son una constante en el imaginario occidental.
La muestra, comisariada por el conservador del museo José Luis Díez Garde y conformada por medio de una colección privada de prendas contemporáneas donadas al MNAD en 2001, está compuesta por más 120 prendas de alta costura (datadas entre los años 80 y 90) de firmas como Chanel, Valentino Couture, Renato Balestra, Emmanuel Ungaro, Givenchy, Yves Saint Laurent o el propio Atelier Versace que se exponen por primera vez en público.
Gianni Versace. Frente al espejo recorre, a través de algunos de los looks más icónicos de la firma de alta costura, la cronología de la marca italiana. Sus inicios más austeros, su inspiración en los pasajes históricos y el germen de lo que posteriormente se denominaría ‘estilo Versace’.
El Museo Nacional de Artes Decorativas plantea un análisis en torno al origen de las influencias del modista: desde la fascinación por Oriente o Grecia, al interés por el arte o su provocación con el cuerpo femenino, la exposición profundiza en las fuentes de inspiración de un hombre que marcó la estética de finales del siglo XX con sus creaciones (y su capacidad de convertir a las modelos en auténticas estrellas). No en vano, el término supermodel se acuña en los años 90, coincidiendo con el auge de sus prendas, y con una fotografía de Peter Lindbergh que vistió la portada de la versión británica de la revista Vogue.