La ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de París 2024, celebrada este viernes a orillas del río Sena, estuvo marcada por la espectacular actuación de la cantante francesa Aya Nakamura. La superestrella de R&B protagonizó uno de los momentos más esperados de la noche con una actuación que combinó música, majestuosidad y un vistoso despliegue escénico, consolidándola como una de las figuras más importantes de la actual escena musical.
Nakamura sorprendió al público desde el Pont des Arts, el emblemático puente parisino que conecta el Instituto de Francia con el Museo del Louvre, con una imponente presentación. Ataviada con un deslumbrante vestido hecho de plumas doradas, la cantante fue acompañada por la orquesta de la Guardia Republicana Francesa y 36 coristas del ejército francés. Esta colaboración entre artistas civiles y militares dio un toque único y solemne a la jornada inaugural.
El repertorio de Nakamura incluyó una mezcla de sus éxitos contemporáneos junto con clásicos de la música francesa. Interpretó temas icónicos como Pookie y Djadja, que la catapultaron a la fama internacional. Además, rindió homenaje al legendario Charles Aznavour con dos de sus canciones más emblemáticas: For Me Formidable y La Bohème. Este tributo emocionó al público y destacó la versatilidad artística de Nakamura.
Nacida el 10 de mayo de 1995 en Bamako, Malí, Aya Nakamura, cuyo nombre real es Aya Danioko, se trasladó a una edad temprana a los suburbios del norte de París en Aulnay-Sous-Bois. Comenzó su carrera musical en línea, utilizando plataformas como Facebook para darse a conocer. En 2014, lanzó los temas Karma y J’ai mal, que le empezaron a otorgar notoriedad en la escena musical francesa. Su colaboración con el rapero Fababy en Love d’un voyou le permitió ingresar a las listas de éxitos en Francia, estableciendo su presencia en la industria.
Brillando junto a otras estrellas
El primer álbum de Nakamura, Journal Intime, llegó en 2017 e incluyó múltiples colaboraciones destacadas. La buena acogida de este trabajo la llevó a presentarse en el estadio Modibo-Keïta en Bamako, lugar donde también actuó como telonera del concertista nigeriano Davido, un destacado encuentro que reafirmó su conexión con sus raíces africanas y consolidó su fama en el continente. Durante la ceremonia, no solo Nakamura atrajo todas las miradas. La célebre artista Lady Gaga también estuvo presente en la inauguración, añadiendo un toque de glamour internacional al evento. Sin embargo, la participación de Nakamura fue sin duda uno de los puntos centrales de la noche, contribuyendo a hacer de la ceremonia una de las más innovadoras y memorables en la historia de los Juegos Olímpicos.
Aya Nakamura ha ido forjando una carrera llena de éxitos y reconocimientos, convirtiéndose en una de las artistas más influyentes de la música urbana contemporánea. Su actuación en la apertura de los Juegos Olímpicos de París 2024 no solo reafirma su estatus en Francia, sino que también proyecta su talento a nivel mundial. La mezcla de contemporaneidad y tradición en su actuación, junto con el impresionante escenario del río Sena y el Pont des Arts, crea un hito inolvidable en la inauguración de estos Juegos Olímpicos. Con una trayectoria que comenzó en plataformas digitales y que la ha llevado a los escenarios más prestigiosos del mundo, Aya Nakamura continúa marcando tendencia y dejando una huella indeleble en la industria musical. La ceremonia de apertura de París 2024 es testimonio de su perseverancia y talento, y promete ser solo uno de los muchos logros que esta joven artista tiene por delante.