Madrid, 18 mar (EFE).- El actor Juan José Ballesta está muy satisfecho con la decisión de la jueza que le investigaba por una presunta agresión sexual de no procesarle y confía en que la causa se archive, según ha explicado en una rueda de prensa en la que ha relatado que le han vetado para muchos trabajos y le han juzgado duramente. "Me han crucificado", ha dicho.
El actor que encarnó a El Bola ha comparecido junto a su letrada, Beatriz Uriarte de Ospina Abogados, para analizar la decisión judicial conocida este lunes y explicar cómo ha vivido este proceso.
La causa empezó tras la denuncia que interpuso en agosto de 2023 una vecina de Parla de 47 años contra el actor y contra otro hombre por sendas violaciones sufridas en julio, tras las que la mujer ingresó en un centro psiquiátrico con un brote psicótico. Desde allí interpuso una denuncia que luego ratificó.
Este lunes la titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Parla decretó la conclusión del procedimiento sin procesamiento para los dos investigados al no ver pruebas que les incriminen. Y ahora será la Audiencia Provincial la que decida si archiva la causa.
"Cuando lo supe pegué un bote", ha reconocido Ballesta. "Doy la gracias a la justicia. Ha sido un año y pico muy duro para mí... Me ha cerrado muchas puertas para muchos trabajos", ha añadido.
"Me decían 'no trabajamos con agresores sexuales', me han cerrado puertas, me han crucificado", ha ido relatando, explicando que también que muchas personas arremetieron contra él tanto en persona como en redes sociales, ante todo lo cual nunca tuvo miedo porque tenía claro que no había hecho nada, pero sí se preocupó por su hijo y por su madre.
Preguntado sobre si se plantea ejercer alguna acción legal contra la mujer que le denunció -que padece esquizofrenia- o contra esas personas que le han insultado, Ballesta ha dicho que no: "Todo el mundo tiene derecho a equivocarse. Yo soy buena gente y perdono a todos", ha afirmado.
En este sentido ha precisado que la denunciante es, según la investigación judicial, una persona con problemas mentales, y él no quiere "darle más problemas".
Ha confiado, al igual que su letrada, en que la Audiencia Provincial archive la causa y en volver a la normalidad y trabajar como actor.
Su letrada, Beatriz Uriarte, ha expresado su satisfacción con la decisión de la jueza de no procesar a Ballesta, muy bien motivada y que deja claro que ambos ni si quiera se habían visto, en la línea que ella ha defendido siempre.
Ha subrayado que la semana pasada la jueza tomo declaración a una testigo propuesta por la acusación que sin embargo, sorpresivamente, relató cómo habló con la denunciante el día de los hechos y en días siguientes y la mujer se mostraba "feliz" con el encuentro que tuvo con el otro acusado, y no mencionaba al actor.
La letrada ha explicado que la magistrada no tiene capacidad en este tipo de casos para dictar el archivo, sino que tiene que elevar su decisión a la Audiencia Provincial para que ésta decida, mostrándose convencida de que así será finalmente.
En el auto dictado por la magistrada se destaca "la concurrencia de hasta tres versiones distintas, dos en dependencias policiales y una en sede judicial" por parte de la denunciante, cuya versión "no se sostiene por ningún extremo".
Explica el auto que en todas las versiones la mujer "atribuye la comisión de dos delitos de agresión sexual a ambos investigados", y no aprecia "motivación espuria o malquerencia" ni una "falsedad consciente" al denunciar. Pero esto no es suficiente.
"Si bien no puede hablarse de una falsedad consciente, concurren en el presente caso motivos para considerar que los hechos referidos por la misma (denunciante) puedan ser a consecuencia de sus problemas de salud mental, la falta de medicación y el consumo de sustancias estupefacientes y bebidas alcohólicas que ella misma reconoció", concluye la magistrada.
La jueza determina que no hay "indicios racionales de criminalidad frente a ambos investigados", que negaron los hechos que se les imputan: el actor adujo no conocer a la denunciante ni haber estado con ella, y el otro investigado negó que la agrediera sexualmente.
Y subraya que una testigo que es amiga de la denunciante y que estuvo con ella el día de los hechos "ha sido determinante para restar aún más la credibilidad a la denuncia de los hechos". EFE
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