Granada, 18 mar (EFE).- El exvicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, ha considerado este martes que hoy adquiere "más valor que nunca" el espíritu del consenso que permitió promulgar la Constitución española de 1978, y ha advertido del riesgo para el sistema democrático que conlleva que la ciudadanía pierda "la fe en sus instituciones".
Guerra, que ha impartido en la Facultad de Ciencias Políticas de Granada la conferencia 'La Constitución, ayer y hoy', ha repasado los hitos y vicisitudes que culminaron con la aprobación de un texto que hoy día considera "dinámico, justo y capaz de vivir muchos años", aunque no por ello debe estar, en su opinión, exento de reformas.
Tras declararse partidario de hacer reformas en la Constitución más que de "la reforma de la Constitución", ha indicado que, en cualquier caso, cualquier modificación requiere de un consenso entre la clase política que no ve posible hoy día, y se ha preguntado por qué.
Esa reflexión le ha servido para enlazar con algunos de los debates abiertos en los últimos años, como la Ley de Amnistía, que ha considerado "la humillación de la generación de la Transición" y una "condena de la Transición" por parte de "jóvenes inmaduros de la llamada nueva política". En definitiva, "una criminalizacion que un demócrata no puede aceptar".
"La pregunta es si cabe extinguir la responsabilidad social de aquellos que fueron responsables de intentar golpear el funcionamiento ordinario de las instituciones. Aceptar en silencio esa agresión nos convertiría en cómplices de la ruptura del país", ha opinado.
También ha advertido contra el riesgo al que se expone el sistema democrático cuando "un pueblo pierde la fe en sus instituciones", antes de referirse al debate sobre la politización del Tribunal Constitucional, algo que, dice, no cree o tiene más bien "la esperanza de que no es verdad".
"Porque de lo contrario se hundiría el sistema democrático", ha agregado el exvicepresidente del Gobierno, que ha confiado en que los magistrados serán "fieles a su compromiso con la legalidad" y no atenderán a los "llamamientos políticos".
Guerra ha afirmado que, "en contra de lo que algunos piensan, hoy adquiere más valor que nunca el consenso del 78", un espíritu que ve "urgente" recuperar para cualquier modificación que quiera plantearse de la Constitución.
Se ha referido al debate sobre las competencias autonómicas para señalar que las comunidades autónomas integran la Constitución pero no la constituyen, que la unidad de España es la igualdad de los españoles y que "la discriminación por motivos identitarios supondría un atentado a ese principio de igualdad".
Guerra ve razones que justifican la reforma de algunos artículos de la Constitución, y ha puesto varios ejemplos, entre ellos lo relacionado con el sistema electoral: "Hay partidos que tienen muy poca representación y están decidiendo muchas cosas. Uno de ellos, con un 1,6 % (de representación) y un prófugo de la Justicia".
Sobre el aforamiento también ha opinado que se recogió para que los diputados y senadores no pudieran ser perseguidos por sus ideas, pero hoy se ha convertido en "algo extraño", porque la formación de los parlamentos autonómicos ha provocado que haya ahora "centenares de aforados". EFE