Madrid, 10 ene (EFECOM).- La presidenta de Navarra, María Chivite, ha prometido “un horizonte de esperanza” para los 660 empleos directos de Esquíroz (Pamplona) tras el encuentro, “positivo” en sus propias palabras, que ha mantenido este viernes en el Ministerio de Trabajo de Madrid con directivos de la multinacional alemana BSH.
La reunión ha sido convocada tras el anuncio que la multinacional BSH hizo el pasado 16 de diciembre de que tiene la intención de cerrar la fábrica navarra en Esquíroz el próximo 16 de junio.
A su salida del encuentro, Chivite (PSN) ha declarado a los medios de comunicación que “se va a crear una mesa de trabajo, en la que estarán los gobiernos de España y Navarra, para explorar todo tipo de posibilidades que podamos poner encima de la mesa para que esto tenga otro resultado” que no sea la pérdida del empleo.
“Estamos hablando de 660 empleos directos y otros tantos indirectos. La empresa ha dicho que ya ha hecho ese esfuerzo de explorar otras alternativas, pero ahora vamos a trabajar juntos posibilidades como otros socios, inversores, re-indutrialización, nuevos productos… todo, para no perder los empleos”, ha añadido.
Aunque la presidenta ha concretado que BSH solo ha abierto la puerta a esa mesa, no a revertir el cierre, ha considerado el encuentro “positivo, porque partimos de nada, y ahora podemos trabajar en un horizonte de esperanza para esos trabajadores”.
Chivite no ha concretado ninguna agenda concreta para que arranquen los trabajos de la Mesa, ni tampoco ha entrado en más detalles sobre las posibilidades alternativas contempladas.
El Comité de Empresa ha mostrado su confianza en la delegación del ejecutivo navarro y está a la espera de la apertura de posibles vías de solución que se articulen en los cinco meses que faltan hasta la fecha anunciada para el cierre.
El pasado 7 de enero la planta de BSH en Esquíroz retomó la fabricación de frigoríficos y lavavajillas tras el periodo de Navidades, con la plantilla pendiente del anuncio de cierre.EFECOM