Amparo Larrañaga protagoniza la obra 'Fitzroy': ¿arriesgarías tu vida por una pasión?

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Madrid, 7 ene (EFE).- Una montaña de 3.405 metros en plena Patagonia, en la frontera entre Argentina y Chile, el 'Fitzroy', es el reto al que enfrenta el dramaturgo Jordi Galcerán a cuatro mujeres que se proponen conquistar uno de los picos más difíciles del mundo. "Tienen que decidir si les merece la pena el riesgo", dice el autor.

El dramaturgo Jordi Galcerán (Barcelona, 1964), autor de obras como 'El método Grönholm', vuelve a unirse al director y autor Sergi Belbel en una comedia de éxito que, tras su estreno en Cataluña hace dos años, llega al madrileño Teatro Maravillas el 10 de enero, protagonizada por Amparo Larrañaga, Ruth Díaz, Cecilia Solaguren y Anna Carreño.

Larrañaga es la jefa de la expedición, 'Cati', psicóloga y escritora de libros de autoayuda en los que no cree, cínica, divertida y "con mucha ambición", explica a EFE la actriz, que no es la primera vez que trabaja con el tándem Galcerán-Belbel.

Un texto que remarca el "afán de superación; una descarga de adrenalina que todos podemos sentir por cualquier cosa que nos apasione. En mi caso, la adrenalina me la da el escenario, pero en el teatro no me juego la vida", reconoce, aunque se pregunta hasta dónde se puede llegar por la pasión de un deporte de alto riesgo.

'Fitzroy' es una comedia sobre un grupo de mujeres decididas a conquistar una de las montañas más desafiantes, a la que nunca ha llegado una cordada femenina.

El mal tiempo las ha obligado a detenerse y, mientras esperan a que las condiciones mejoren, surgen problemas inesperados que las hacen dudar entre continuar el ascenso o rendirse.

"Voy de jefaza, con el látigo en la mano", advierte Larrañaga, feliz de trabajar rodeada de mujeres, en una historia de solidaridad, conflictos, traición y retos, impresionada por la pared que ocupa el escenario y que representa la montaña.

Autor de éxito, Galcerán asegura que cosecharlo obedece a una cuestión "multifactorial, unas veces lo tienes y otras no, y no sabes qué ha fallado, pero siempre intentas hacerlo bien". Entonces recuerda la excelente acogida de 'Burundanga' en Madrid donde estuvo en cartel varios años, mientras que en Barcelona "pasó sin pena ni gloria".

El dramaturgo no quería hacer una obra sobre mujeres sino sobre el desafío. "Admiro profundamente el espíritu aventurero porque yo no lo soy", confiesa.

El reto de la escalada es "mayúsculo y se puede tomar como ejemplo de los restos a los que te enfrentas en la vida. Ellas no son amigas, se unen por su afinidad a la montaña y se plantean si vale la pena subir aun a riesgo de su vida", sostiene.

Galcerán compara ese trance en la montaña con los récords Guinness. "¿Por qué y para qué hacen eso? Dedican tiempo y dinero", se pregunta. Sin embargo, cree que ese tipo de personas decididas, que arriesgan, "son las que nos ayudan a avanzar". EFE

(foto)

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