Carlos Rosique
Valencia, 26 dic (EFE).- La dana que azotó la provincia de Valencia el pasado 29 de octubre dejando 223 muertos y tres desaparecidos amargó las bodas de plata del circuit Ricardo Tormo de Cheste, ubicado precisamente junto a la rambla del Poyo, uno de los barrancos que se desbordaron aquella fatídica jornada provocando los mayores destrozos en la provincia del último siglo.
Esta trágica dana destruyó los accesos de las instalaciones del circuito valenciano, que, sin embargo, ha recibido desde entonces un alud de solidaridad del mundo del motor, pero que desde su reapertura se ha convertido también en símbolo de esperanza, siendo un centro de operaciones para canalizar ayuda y visibilizar esta catástrofe.
El Circuit había acogido semanas antes los FIA Motorsport Games, que se celebraron por primera vez en España y que reunieron a 86 equipos nacionales y casi mil pilotos distintos en 26 disciplinas distintas. Sin embargo, la catástrofe obligó a cerrar la actividad del circuito, suspendiendo los entrenamientos de la FIA Formula E, el FIM JuniorGP y el Gran Premio de la Comunitat Valenciana.
Inaugurado en 1999, el circuito pretendía que este 2024 fuera un año de celebración que se cerrara con un GP de la Comunitat Valenciana estelar, en el que el español Jorge Martín y el italiano 'Pecco' Bagnaia se disputaban el título en la última carrera del año.
Pero presentado incluso el cartel de esta nueva edición, este desastre natural sin precedentes frustró el gran premio y cualquier otro que se disputara en noviembre, mientras el Circuit emergía como una instalación en la que amontonar los vehículos siniestrados de otras poblaciones y, a la vez, como una ventana para compartir cualquier forma de ayuda a Valencia.
El GP de MotoGP, la cita deportiva más importante que acoge el Circuit y que era el cierre de la temporada de la competición, se suspendió y se eligió el circuito de Montmeló (Barcelona) para concluir el curso.
No obstante, el fin de semana en Montmeló llevó por nombre Gran Premio de la Solidaridad de Barcelona, en el que todos los beneficios, un total de 1,6 millones de euros, se destinaron a Cheste y de Chiva, las localidades afectadas más cercanas.
Pero este respaldo económico hacia la zona llegó de múltiples sitios y, de hecho, el Circuito de Assen donó 50.000 euros para renovar la maquinaria del Circuit afectada por las inundaciones.
No obstante, las acciones solidarias no acabaron en ayudar al circuito, sino que el propio Ricardo Tormo también acogió una cita clave, una de las más importantes de su historia pese a no tener nada que ver con el deporte, aunque sí con el automovilismo.
Consciente de la magnitud de la tragedia, Joaquín Durán, un valenciano afectado más por la dana, fundó la iniciativa Solidaridad Sobre Ruedas, una iniciativa a la que rápidamente se apuntaron pilotos como Carlos Sainz, Jorge Martínez Aspar, Marc Márquez, Fernando Alonso o Carlos Sainz Jr.
Solidaridad Sobre Ruedas recoge a través de su página web dinero o vehículos cuyos dueños no utilicen para poder entregarlos a las personas afectadas por este desastre, pues el 29 de octubre quedaron siniestrados más de 128.000 vehículos siniestrados.
Así, el pasado 22 de noviembre, en un acto que contó entre otros con Carlos Sainz o Aspar, se entregaron los primeros ochenta vehículos a otras tantas familias, aunque es apenas el primer paso, pues la asociación espera donar más de 1.000 vehículos entre coches y motos.
Para el director general del Ricardo Tormo, Nicolás Collado, "el Circuit es mucho más que una instalación deportiva".
"Aunque nos haya afectado mucho la cancelación de los eventos en este tiempo, podemos estar contentos de la ayuda que tenemos la oportunidad de ofrecer a nuestros vecinos más directos y a todos los afectados por esta terrible tragedia", indicó Collado en una nota oficial del Circuit.
No obstante, antes de que la dana azotara la provincia, el Circuit celebró ya un total de 17 eventos en este 2024, con una afluencia total de 134.500 aficionados a las gradas del Circuit, siendo los FIA Motorsport Games la competición más importante.
Sin contar los 37 días en los que la pista estuvo cerrada debido a los destrozos de los accesos, el índice de actividad ha sido del 87,4 por ciento, por lo que entre el 1 de enero y el 28 de octubre, casi nueve días de cada diez el semáforo estuvo en verde.
Eso sí, en esos 37 días sin actividad, los operarios del Circuit recogieron alrededor de 18.000 toneladas de lodo sobre una superficie afectada de aparcamiento de más de 170.000 metros cuadrados, aunque el trazado reabrió el pasado 5 de diciembre con los primeros entrenamientos privados.
Para ello, se estableció un itinerario de acceso alternativo al habitual que deberá ser reparado de cara al inicio de la próxima temporada, aunque por ahora se ha creado una vía provisional y se está a la espera de la reconstrucción de tres de los cuatro accesos de las instalaciones para poder llevar a cabo eventos con público. EFE