El portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Miguel Tellado, ha remarcado este lunes que la intención del PP es seguir alcanzando acuerdos con Junts en el Congreso sobre medidas que sirvan para mejorar la calidad de vida de la gente y ha subrayado que el acercamiento de su partido a los de Carles Puigdemont plantea "recelos", pero "fundamentalmente" en el PSOE.
Así se ha pronunciado en una rueda de prensa en el Congreso en la que se le ha preguntado expresamente sobre las palabras del líder del PP catalán, Alejandro Fernández, quien apoya que se llegue a pactos puntuales con Junts, pero a la vez alerta de que Carles Puigdemont "es material tóxico" y todo el que se acerca a él acaba "quemado".
"Es verdad que hay recelos en el ámbito político en España por las relaciones del PP con Junts, pero residen fundamentalmente en el PSOE, que está tremendamente preocupado", ha respondido el portavoz 'popular' evitando opinar sobre los avisos de Fernández.
A Tellado también se le ha preguntado si alguien del PP estaría dispuesto a reunirse con Puigdemont, como sí tiene previsto hacer Sánchez, según ha remarcado el propio presidente del Gobierno, aunque aún no haya fecha para ese encuentro.
EL PP NO TIENE QUE IR A SUIZA
Tellado ha hecho hincapié en que las relaciones con Junts se circunscriben al ámbito "parlamentario" y a la búsqueda de acuerdo para "mejorar la calidad de vida de las personas". "Aquí es lo donde se hace política, malo es que es tenga que ir a Suiza a decidir el futuro de España", ha abundado.
Así, ha incidido en que los acuerdos alcanzados con los independentistas catalanes sirven para aprobar "bajadas de impuestos sin chantajes ni cesiones", a diferencia de los que ha sellado Sánchez, "que ha subastado todo su programa electoral cediendo lo que no estaba escrito con tal de ser presidente".
Sobre la posibilidad de que ese acercamiento a Junts acabe fructificando en una moción de censura, el portavoz se ha limitado a decir que en el PP van a seguir "trabajando para que en España se vislumbre claramente la existencia de una alternativa", mientras que el Ejecutivo de Sánchez vive "en la supervivencia absoluta".