Roma, 20 dic (EFECOM).- El índice de confianza de los consumidores en Italia registró en diciembre una caída de tres décimas, situándose en 96,3 puntos frente a los 96,6 de noviembre, mientras que el índice empresarial subió más de dos puntos, de 93,2 a 95,3.
Los datos, divulgados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística italiano (Istat), confirman la tendencia a la baja del índice de confianza de los consumidores, que vuelve a caer por tercer mes consecutivo.
En cuanto a los consumidores, destaca el empeoramiento en las expectativas sobre la situación económica del país y sobre el desempleo, lo que se refleja en una caída de la opinión sobre el clima económico de 97,8 a 96,1 y el clima de futuro, de 93,8 a 93,3.
Por otro lado, el clima personal registra un leve aumento de dos décimas, de 96,2 a 96,4 puntos, y el clima actual permanece estable.
“La dinámica negativa del índice refleja un deterioro de las expectativas tanto sobre la situación económica general (incluidas las expectativas sobre el desempleo) como sobre la situación personal; también empeoran las opiniones sobre el balance familiar y sobre la oportunidad de ahorrar en la situación actual”, ha argumentado el Istat.
En el caso de las empresas, que presenta un dato positivo tras dos meses de caídas, aumenta el índice de confianza en los servicios, aunque con “intensidad diferente entre los sectores".
“El aumento del índice está impulsado por el sector de servicios de mercado, donde se registra una mejora generalizada de las opiniones de los empresarios, especialmente en el sector de la información y la comunicación y en los servicios a empresas y otros servicios”, ha explicado el Istat.
Por el contrario, los índices de confianza del sector industrial, en la manufactura, mejoran los indicadores solo en las expectativas de producción, y en la construcción empeoran amabas variables.
En el sector de servicios de mercado se observa una evolución positiva de todos los componentes del indicador, mientras que en el comercio minorista los juicios sobre las ventas mejoran, pero las expectativas sobre las ventas disminuyen y los inventarios se considera que siguen en aumento. EFE