Madrid, 19 dic (EFECOM).- Fedea propone compensar a las personas responsables del cuidado y crianza de los hijos, fundamentalmente madres, con años cotizados adicionales por esos periodos ausentes de la vida laboral, con el objetivo de reducir la brecha de género en las pensiones.
En un documento publicado este jueves, Fedea plantea sustituir el actual complemento monetario de maternidad por años cotizados en una cuantía que no detalla, pero que debería ser "ostensiblemente mayor a la actual".
A su juicio, tanto los complementos de mínimos como el complemento de maternidad actual, que permite a uno de los progenitores ingresar junto a su pensión 27 euros al mes por hijo hasta un máximo de cuatro, son una "buena forma" de compensar principalmente a mujeres que tienen hijos a cargo por las "trabas en su trayectoria laboral".
Sin embargo, no han llegado a reducir la brecha de género sobre todo para aquellas generaciones que ya se han jubilado y que iniciaron su carrera contributiva en la etapa franquista o los años inmediatamente posteriores.
Dichos complementos, añade, "sólo actúan sobre la brecha monetaria, sin abordar el retraso en la edad media de jubilación causado por la dificultad en el acceso a las opciones de jubilación anticipada", al no tener los años cotizados necesarios.
Fedea sostiene que la opción óptima sería permitir una jubilación anticipada voluntaria abierta a todos los trabajadores con derechos acumulados por encima de la pensión mínima y compatibilidad plena entre trabajo y pensión.
Sobre este esqueleto, añade, se podría aumentar el número de años cotizados en la base reguladora así como emplear todas las cotizaciones realizadas.
También reducir la tasa de reemplazo incluyendo un eventual tránsito hacia un sistema de contribución definida, premiar las carreras largas sin castigar las no tan largas y compensar los años de crianza y cuidado de menores, especialmente relevantes para las mujeres de renta media o baja.
En su estudio, Fedea revela que la brecha de género en las carreras contributivas se debe a las "evidentes diferencias en la participación y empleo" entre mujeres y hombres de las generaciones que se han jubilado en las dos últimas décadas.
Ello es consecuencia de las "numerosas restricciones de entrada en el mercado de trabajo a las que se enfrentaban las mujeres, especialmente las que tenían hijos a cargo, en España durante el franquismo".
De esta forma se generó una brecha en pensiones para las cohortes nacidas en los 40 y 50, dice Fedea, en "un sistema de pensiones pensando para hombres que casualmente también utilizan las mujeres (madres)". EFECOM