San Sebastián, 17 dic (EFE).- El IDK Gipuzkoa, colista de la liga femenina Endesa de baloncesto, tiene este miércoles una oportunidad histórica de superar los dieciseisavos de final de la Eurocup, para lo que necesita ganar al Charnay Bourgogne francés.
El errático comportamiento de las donostiarras en la competición nacional, hundidas en el fondo de la clasificación tras perder la pasada jornada contra un Ensino que ocupaba la plaza de colista y que ahora le ha traspasado (46-75), contrasta con su espectacular rendimiento europeo.
El IDK marcha invicto en la segunda liga continental en la que ha sumado seis victorias en una fase de grupos que lideró y la pasada semana empató a 68 puntos en una de las canchas más difíciles de la liga francesa, la de un Charnay al que ahora está obligado a ganar en San Sebastián para alcanzar los octavos.
Las guipuzcoanas serían favoritas por el factor cancha y por la imagen que dieron en Francia, pero sus malos resultados en la Liga Femenina Endesa dejan muchas dudas de su solvencia e, incluso, sobre si el hecho de prolongar esta aventura europea les vaya a pasar una factura difícil de abonar en la competición española.
Laura Cornelius, el último fichaje del equipo vasco, debutará en Europa y puede ser de gran ayuda junto a la recuperación de la americana Delicia Washington, lesionada en la ida, por lo que el IDK suma argumentos para doblegar a un conjunto galo que marcha a un solo triunfo del liderazgo en su país.
Frenar a Thomas y Makany, que la pasada semana lograron entre ambas 44 puntos, será la clave para tener serias opciones de pasar de ronda. EFE
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