El Consejo de Ministros ha autorizado destinar más de siete millones de euros en la fabricación y distribución de equipo básico, de combate y uniformes de trabajo para las Fuerzas Armadas.
Según se desgrana en las referencias, la modificación del contrato no estaba prevista, pero ha derivado de la necesidad, "sobrevenida e imprevisible", de atender a la demanda de suministro de vestuario generada por un aumento significativo de alumnos en los distintos centros de formación de las fuerzas armadas.
Por ello, el Consejo ha autorizado la modificación no prevista del contrato de fabricación y distribución, mediante el sistema personalizado vía internet, pedidos extraordinarios, o bien sistema tradicional, de artículos correspondientes al equipo básico, equipo de combate, uniformidad de conductores y uniformidad de trabajo por un importe exacto de 7.945.000 euros.