Valladolid, 11 dic (EFE).- La exmujer del acusado de asesinar a cuchilladas a su pareja, Paloma, de 45 años, y a la hija de ella, India, de 8, ha asegurado este miércoles que durante el tiempo de relación y matrimonio con el procesado, David M.L., él era "muy celoso y controlador".
La exesposa del procesado ha comparecido como testigo en la primera sesión de la vista oral que se celebra en la Audiencia de Valladolid por hechos ocurridos durante la madrugada del 23 de enero de 2023 en un quinto piso de un edificio del céntrico Paseo Zorrilla de Valladolid, donde convivían las víctimas y el encausado, quien se enfrenta a la petición de prisión permanente revisable.
La testigo, que ha declarado tras un biombo que impedía que se viera con el acusado, ha puesto como ejemplo de la personalidad controladora del procesado que cogía su teléfono para ver sus conversaciones y comprobar donde había estado, además de que no le gustaba nada que hablara con chicos.
Ha recordado que vivió episodios violentos por parte de su entonces marido, al que solo denunció en una ocasión, en 2017.
Ha tachado a David M.L de mentiroso compulsivo, independientemente de si consumía alcohol, ha dicho que conocía su adicción a la bebida, sobre la que él le pidió muchas veces ayuda y ante lo que ella le acompañó a varios sitios, aunque después dejaba los tratamientos voluntariamente y recaía.
La madrugada en que el supuesto autor cometió los dos crímenes, puso un mensaje de WhatsApp a su exmujer sobre la 1.30 horas, que ella vio cuando se levantó por la mañana, en el que decía "la culpa es tuya, esta es la consecuencia", ha explicado la testigo.
También ha declarado durante esta tarde en la sala de vistas una hermana del acusado, quien ha sollozado durante su comparecencia, se ha mostrado visiblemente nerviosa y ha recordado que su hermano le llamó por teléfono durante la madrugada de los sucesos.
"Ay, lo que he hecho", dijo el procesado en aquellos momentos, manifestó que había matado a Paloma e India y ella no se lo creía tras lo que pasó el teléfono a su marido, ha especificado la testigo, quien ha concretado que le dio la impresión de que estaba bebido o drogado.
Su marido ha confirmado durante el juicio que habló con el procesado cuando su mujer le pasó el teléfono aquella madrugada, cuando David M.L. le confesó que había hecho una barbaridad, aunque no ha recordado las palabras precisas y, cuando consiguió que le dijera donde estaba, colgó el teléfono y avisó al 112.
Otra hermana del acusado, que también ha llorado durante su declaración, ha confirmado que notó al procesado nervioso el día del suceso por la mañana tras haber recibido la demanda de divorcio y ha reconocido que sabía de los problemas del acusado con las drogas y el alcohol.
"Es lo que me ha destrozado la vida", ha descrito, tras lo que ha exclamado varias veces la frase "cuántas veces dije: David, no bebas".
El juicio, con jurado popular, continuará mañana jueves con la declaración de más testigos, en primer lugar familiares de las dos víctimas mortales. EFE
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