Logroño, 6 dic (EFE).- El Logroño La Rioja encara el partido ante el Barcelona como una oportunidad para iniciar su mejoría después de "tocar fondo" en su juego la semana pasada, en la pista del Aranda, donde su derrota le ha situado undécimo en la tabla, su peor situación en los últimos años.
El entrenador del equipo riojano, Miguel Ángel Velasco, es quien reconoce que su equipo "ha tocado fondo" en el juego, ha explicado a Efe, y si en algunas derrotas su equipo cayó fruto de pequeños errores, en el último partido admite que el naufragio fue total.
También es cierto que el Barcelona es un rival ante el que no hay presión, dada su superioridad, "pero tampoco podemos dejar que nos gane de veinte y si no mejoramos lo pueden hacer", asume el preparador del Logroño.
"No nos queda otra cosa que mejorar, ir hacia arriba", ha incidido el preparador, que reprocha a sus jugadores la actitud mostrada en el último choque "y espero que se hayan dado cuenta de que para ganar un partido hace falta más intensidad, carácter y garra".
Especialmente reprocha a su plantilla "la irregularidad" dentro de un mismo partido y espera que el trabajo de esta semana "que ha sido más serio" les sirva mañana "no se si para ganar, pero sí para mostrar otra cara" no solo por el choque con el Barcelona "sino porque tenemos un final de primera vuelta duro" y "debemos ser competitivos y dar buenas sensaciones, con independencia del resultado", concluye Velasco.
Los riojanos siguen sin poder contar con el cubano Ángel Rivero y durante la semana apenas ha podido contar con Xavi Tua en los entrenamientos, por problemas en un tobillo, aunque esperan que mañana pueda "ayudar" lo mismo que Martí Soler, cerca de culminar su recuperación. EFE