El Congreso ha saldado este jueves una deuda histórica, la que tenía con las 'madres' de la Constitución, las 27 mujeres que formaron parte de las Cortes Constituyentes que alumbaron la Carta Magna que este viernes cumple 46 años, y lo ha hecho con un acto en el que se ha reivindicado su "valioso legado" y se ha inaugurado una placa con los nombres de todas ellas.
La placa se ha colocado en la Sala Constitucional, la segunda más importante del Congreso y que desde hace años alberga los retratos de los 'padres' de la ley de leyes. El acto ha estado presidido por la presidenta del Congreso, Francina Armengol, ha contado con la presencia de varias de las constituyentes y ha estado moderado por Julia Sevilla, coautora de un libro sobre la labor de estas pioneras.
Armengol ha subrayado que aquellas 21 diputadas y seis senadoras supieron "hacerse oír" frente a los 637 hombres que fueron elegidos en las elecciones de 1977. "A todas les debemos todo", ha dicho, ensalzando cómo supieron "trabajar en equipo desde la sororidad", asumiendo sus "discrepancias políticas". "Para conseguir avanzar supieron verle más utilidad a la cooperación que a la destrucción del adversario político", ha resaltado.
NO CONSEGUIMOS NADA PELEANDO ENTRE NOSOTRAS
"Si algo hemos aprendido del feminismo es que no conseguimos nada peleándonos entre nosotras. Debemos ir a por un objetivo común, todas sujetas al mismo hilo invisible, la misma cadena de voluntades que ensancha la igualdad, a menudo luchando contra la incomprensión de quien no ve sus propios privilegios. Demasiadas veces poniendo el cuerpo, siempre en minoría, pero teniéndonos las unas a las otras", ha abundado Armengol.
Julia Sevilla, autora de 'Las mujeres parlamentarias en la legislatura constituyente', ha recordado que aquellas diputadas y senadoras no estuvieron de acuerdo con la primacía del varón sobre la mujer en la línea sucesoria de la Corona y que todas, salvo la socialista Carlota Bustelo que se quedó para defender su posición, abandonaron la sala cuando se debatió ese punto.
También ha mencionado lo que costó la entrada de las mujeres en las listas electorales, puesto que hasta la cuarta legislatura no hubo medidas de discriminación positiva. Teresa Revilla, ha recordado que su partido, la UCD, la colocó "donde pensaba que no iba a salir", pero salió. De hecho, fue la única mujer en formar parte de la Comisión Constitucional porque reunió el valor para llamar a Leopoldo Calvo Sotelo para protestar porque no había ninguna.
RELEGADA TRAS MANDAR CALLAR A UN MINISTRO
En la primera legislatura llegó a presidir la Comisión de Cultura, pero fue relevada después de mandar callar al ministro del ramo, Manuel Clavero (aunque ella no ha dado el nombre), porque tomó la palabra sin que ella se la diera. Ya no volvió a ir en ninguna lista electoral.
La socialista María Izquierdo Rojo ha recordado que en aquellas Cortes apenas hubo "aplausos" hasta que hubo acuerdo sobre el texto constitucional y ha contrastado el "consenso, la cooperación y la amabilidad" que lo hizo posible, con la "polarización" actual que "agría el clima político hasta hacerlo irrespirable". Según ha denunciado, los modos actuales "condicionan los contenidos hasta invalidarlos". "Con estas formas, los contenidos son mínimos y el resultado es la nada", ha advertido.
Por ello, ha llamado a desterrar "el actual envilecimiento de la política" y a volver a los modos del 77 "por salud y lealtad democrática", a recuperar lo que ha llamado "el método constitucional" que sirvió para que se entendieron quienes habían sido "enemigos" porque todos perseguían el objetivo de asentar la democracia y dar soluciones a la ciudadanía.
TODOS LOS DÍAS ENSEÑANDO EL DNI
Dolores Calvet, del PCE, ha explicado que nunca pudo entrar en el Congreso sin enseñar antes el DNI y que, al día siguiente de la constitución de las Cortes apareció en los pies de foto de la prensa como "secretaria" de Dolores Ibárruri 'Pasionaria', junto con Pilar Brabo, la otra diputada que acompañó a la histórica dirigente comunista en su regreso al hemiciclo.
Calvet ha aprovechado su intervención para alertar contra la posible involución en los derechos de las mujeres y dejar claro que sigue dispuesta a luchar para que "no se vuelva atrás" y las mujeres no tengan que volver a reivindicar lo mismo que hace 40 años.
Belén Landáburu, que llegó al Congreso en 1967 como 'procurador familiar', impulsó en 1972 la reforma del Código Civil para rebajar a de los 25 a los 21 años la mayoría de edad de las mujeres, después fue ponente de la Ley de Reforma Política y ya en 1977 fue una de las dos senadoras por designación real y ponente de la Constitución en la Cámara Alta, donde enmendó el artículo que se había aprobado en el Congreso para dejar constancia de que el hombre y la mujer accederían "en plena igualdad jurídica" al matrimonio.
También ha tomado la palabra la feminista y diputada socialista Carlota Bustelo: "Hicimos muchas más cosas importantes de la que en aquel momento nos creímos", ha enfatizado.
En el homenaje han estado presentes la ministra de Igualdad, Ana Redondo; el titular de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, los portavoces titulares del PP, Miguel Tellado; el PSOE, Patxi López, y Sumar, Verónica Martínez, mientras que la de Vox, Pepa Millán, no ha acudido porque considera que los actos del Congreso con motivo del Día de la Constitución son "hipocresía patrocinada y protagonizada por quienes se dedican a pisotearla".