Excelencia e ilusión, la receta de reconocidos chefs para liderar la gastronomía mundial

Oviedo, 4 dic (EFE).- Apostar por la formación y la excelencia, por la colaboración entre generaciones de amigos y por jóvenes que tengan claro que lo importante no es el reconocimiento, sino trabajar con ilusión y sentirse feliz haciendo lo que a uno le gusta son ingredientes que, según ocho de los cocineros españoles más influyentes de la historia, permitirán que la gastronomía española se mantenga en el top mundial.

"Lo mejor está por venir en la cocina española, pero hay que trabajar duro para mantener lo conseguido en las últimas décadas", ha subrayado Martín Berasategui que, junto a Ferrán Adrià, Joan Roca, Pedro Subijana, Elena Arzak, Quique Dacosta, Hilario Arbelaitz y José Andrés han participado en el homenaje que se les ha brindado este miércoles desde Asturias.

Luis Aduriz y Karlos Arguiñano no han asistido por problemas de agenda a este homenaje que la Asociación de Restaurantes Fomento de la Cocina Asturiana ha rendido a algunos de los chefs más conocidos del país a pocas semanas de que Oviedo deje de ser la capital gastronómica de España y de que Alicante recoja el testigo.

Un encuentro que ha arrancado con un aplauso por el reconocimiento que minutos antes había conseguido la cultura sidrera asturiana como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, pero también con otro para rendir homenaje a los tres trabajadores de la ONG de José Andrés que fallecieron este fin de semana en Gaza por un ataque de Israel y por los afectados por la dana.

Ante varios cientos de personas, entre ellos muchos cocineros y la familia Manzano, que al frente de Casa Marcial acaba de conseguir tres estrellas Michelín, José Andrés ha señalado que "hay que estar celebrando lo bueno, no lo malo", que hay gente ayudando a gente y a su lado.

El cocinero asturiano, que con su restaurante El Jaleo fue el primero en introducir la cocina de tapas en Estados Unidos, ha incidido en que "todos podemos crear un mundo mejor, pero para eso nos lo tenemos que creer, como ha hecho esta gente", en referencia al resto de chefs con los que compartía escenario en el Auditorio Príncipe Felipe de la capital asturiana.

Adrià, copropietario de El Bulli, templo gastronómico situado en la Cala Montjoi (Girona) que cerró sus puertas hace once años tras ser distinguido en varias ocasiones como el mejor restaurante del mundo, ha destacado que el de hoy quizás sea el primer homenaje que se hace a la gastronomía española.

"Tenemos que aprender a querenos aquí porque si no nos queremos a nosotros mismos difícilmente nos van a querer fuera", ha afirmado antes de asegurar que "gracias a la unión de distintas generaciones" y a una competitividad y ambición que no impidió que siguieran siendo amigos, se ha logrado situar a la cocina española en el top mundial.

Para Joan Roca, cocinero del Celler de Can Roca y considerado uno de los mejores chefs del mundo, hay que tener en cuenta que "no es nada fácil poner en marcha un restaurante" y que lo importante para un cocinero no es conseguirlo ni tener una estrella Michelin: el éxito "es conseguir ser feliz haciendo lo que a uno le gusta".

"Casi 50 años después sigo siendo aprendiz y siempre seré el eterno aprendiz", ha señalado Martín Berasategui, poseedor de once estrellas Michelín, que ha reivindicado la "cultura del esfuerzo" y la necesidad de ir más allá de la excelencia universitaria para "transmitir la excelencia profesional".

Pedro Subijana , que dirige el restaurante Akelarre y fue uno de los impulsores del Basque Culinary Center, ha admitido también que hace cuarenta o cincuenta años "esto era impensable" y que se ha conseguido gracias a "la colaboración, apoyo y buen rollo" que a finales de los setenta y ochenta propició el nacimiento de la nueva cocina vasca.

Elena Arzak, hija de Juan María Arzak, uno de los cocineros más premiados del mundo e impulsor de esa nueva cocina vasca, se ha mostrado convencida de que la formación marcará el futuro, porque "en el conocimiento está la fuerza" de las nuevas generaciones.

Quique Dacosta, que desde su restaurante de Denia se sitúa entre los chefs más vanguardistas del mundo, ha añadido que si la cocina española ha liderado la gastronomía mundial es porque fue capaz dejar atrás el oscurantismo en el que se movía hace décadas y pasar "a un código abierto en todos los sentidos".

"Seguir ilusionándose con el futuro quizás es lo mas relevante. La ilusión nos va a seguir llevando a que la gastronomía española lidere la mundial", ha afirmado Dacosta. EFE

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