Madrid, 3 dic (EFECOM).- ICEX España Exportación e Inversiones ha puesto el foco en Corea del Sur, Japón, Polonia, Irlanda, Dinamarca y República Dominicana como mercados con potencial para el vino español.
La directora de Alimentos, Vinos y Gastronomía de ICEX España Exportación e Inversiones, María Naranjo, ha expuesto los retos para la internacionalización del vino de España y uno de ellos es la diversificación de mercado.
Naranjo ha participado este martes en una jornada para la presentación de la próxima edición del salón Barcelona Wine Week en la que ha profundizado sobre estos retos para el sector vinícola.
Antes de profundizar en ellos se ha recordado el último informe del Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMv), según el cual, en los ocho primeros meses de 2024 España exportó 1.198 millones de litros de vino (-3,1 %) por valor de 2.938 millones (-0,1 %).
Es decir, una tendencia a la baja, aunque sigue siendo el principal exportador mundial de vino en términos de volumen y el tercero en valor, según se ha destacado durante la jornada.
Naranjo ha enumerado una lista de esos retos, entre los que se encuentran la consolidación en grandes mercados; mejorar el comportamiento en valor que en volumen; diversificar e identificar los destinos con potencial.
Además, ha apostado por invertir en formación en vino "en todos los niveles, tanto fuera como dentro" del país; "no olvidar" tendencias de consumo indagando en "nuevos nichos" como el "auge" de los vinos blancos, apostar por lo "premium" a través del impulso a club de sumilleres o el enoturismo.
Ve también como reto "irrenunciable" la apuesta por la digitalización porque sólo el 15 % de las empresas del sector del vino usan el comercio electrónico.
El director general de la Federación Española del Vino (FEV), José Luis Benítez, ha participado en una de las mesas de debate, en las que ha disertado también sobre tendencias, entre ellas el auge de los vinos blancos, ligeros y espumosos.
Son caldos que pasan por un "momento dorado", pero ha pedido tener en cuenta la relación calidad-precio para mantener esas tendencias.
Ha añadido que, "a veces, para ir hacia esas tendencias hace falta abrir las regulaciones"; es decir, "ser rápidos en las respuestas" a nivel normativo para que los productores "puedan acometer los desafíos" necesarios que den respuesta a la demanda del mercado.
Benítez ha apuntado que el sector vitivinícola es "sostenible en el sentido amplio" porque permite la permanencia en el medio rural, la "recuperación" de zonas olvidadas o el mantenimiento de paisajes.
En cuanto al comercio de proximidad, que también se suele vincular con sostenibilidad, ha reconocido que el mercado del vino es "netamente exportador" por lo que "el kilómetro cero está fenomenal pero el kilómetro 10.000 también está bien porque no queda más remedio". EFECOM