Sevilla, 2 dic (EFE).- El Betis de Manuel Pellegrini da señales de crisis después de encadenar en una semana tres derrotas consecutivas, como ha reconocido el propio técnico chileno de una racha de resultados en la que el centrocampista argentino Giovani Lo Celso ha considerado, elocuentemente, que lo que toca es "masticar bronca".
'Enojo, enfado, rabia' , bronca en el español de América, definen el estado de ánimo del vestuario bético después de perder este domingo en San Sebastián y evidenciar nuevamente que, si no se ha 'caído', el equipo bético hace gala de un juego inane y sin pulso que se ha traducido en las lacerantes derrotas ligueras ante el Valencia (4-2) y Real Sociedad (2-0), y ante el Mladá Boleslav checo (2-1) en Liga Conferencia.
El entrenador santiaguino ya sabe lo que es pasar por situaciones análogas a la actual del Betis y, por ello, ha tirado de manual para apuntar, entre otros asuntos que "otras veces" tuvieron "cuatro derrotas seguidas y eso siempre es más difícil que dos" y que "ni es una crisis tremenda ni da para desarmar todo" lo que están haciendo.
No obstante, tras la dolorosa derrota en tierras bohemias sí reconoció que "el jugador quiere, pero no puede y empieza de desdibujarse", que están en "un bache futbolístico fuerte" y que le "interesa que el equipo no toque fondo", aunque sí siguió en su particular cuesta abajo en el duelo ante los de Imanol Alguacil.
El Betis había alcanzado a finales de octubre ante el Atlético de Madrid (1-0) un punto óptimo en su juego que tuvo continuidad en Bilbao ante el Athlétic (1-1) y en los tres puntos europeos ante el Celje esloveno (2-1), aunque después de un empate casero ante el Celta (2-2) el equipo empezó a dar señales de planicie, de estar romo.
En Mestalla, seis minutos de desconexión costaron una goleada; en tierras checas, ni se conectó; y en el Reale Arena, más de lo mismo con la única noticia esperanzadora del debut en Primera División del canterano Jesús Rodríguez, único asidero de ilusión de una afición que ve cómo su equipo se está 'cayendo'.
Hay bajas de importancia -Isco, Carvalho, Marc Roca, Johnny Cardoso o Pablo Fornals- a las que poder apelar, aunque Pellegrini siempre lo ha hecho al valor de una plantilla que, a estas alturas de la competición, no ha respondido ni estado a la altura de lo que el chileno denomina "los rendimientos individuales".
El entrenador de Santiago incidió en estas carencias tras el duelo del Reale Arena al afirmar que "faltó fútbol y creatividad" porque le faltan esos "jugadores creativos" y no pueden "hacer mucho daño, pero el grupo está fuerte, consciente de la situación y con confianza" de que puede "revertir la dinámica".
"Obviamente, debemos corregir lo que estamos haciendo mal y hacer autocrítica. Debemos estar todos juntos en estos momentos. Hay partido de Copa el miércoles y luego viene el Barcelona. Debemos exigirnos todos y hay que masticar bronca y dar vuelta a la página", ilustró Lo Celso sobre el estado de ánimo de la plantilla.
En vísperas de afrontar la segunda eliminatoria de Copa del Rey ante el Sant Andreu y de recibir el próximo sábado a un Barcelona urgido en el Benito Villamarín, los de Manuel Pellegrini vuelven este lunes a entrenar para recomponer los conceptos y los ánimos para darle la vuelta a la situación.
Pese a la evidente caída del juego y de las tres derrotas consecutivas, el técnico de Santiago es conocedor de lo tornadizo del fútbol y de que, como mantuvo antes del duelo en San Sebastián, no considera estar ante una "crisis tremenda". Ya el maestro de periodistas José Antonio Sánchez Araújo, con miles de partidos y horas de micrófono a sus espaldas, lo acuñó: "en fútbol no eleven nunca nada a definitivo. EFE