Madrid, 2 dic (EFE).- Tras el recién estrenado invierno meteorológico, que ha dejado unos días de temperaturas cálidas para la época del año, el puente de diciembre podría estar marcado por un acusado descenso térmico que derivaría en un ambiente de "pleno invierno", ha avanzado el portavoz de Aemet, Rubén del Campo.
A partir del próximo sábado es posible que se produzca la llegada de una masa de aire frío de origen continental, ha pronosticado Del Campo, quien resalta que se esperan nevadas en zonas de montaña y aledañas del extremo norte y también en las Islas Baleares, aunque se tendrá que ir confirmando los próximos días.
Esta semana, la primera completa de diciembre, arranca con un descenso de las temperaturas y un ambiente algo más fresco, pero con valores dentro de lo normal para la época del año o incluso con un ambiente algo templado; en cuanto a las lluvias, en los próximos días serán en general escasas en la mayor parte del país, salvo en el extremo norte de la península y en puntos de Baleares.
De momento, este lunes un frente asociado a una borrasca atravesará la península de oeste a este y dejará lluvias en buena parte de la mitad norte, sin descartar que lleguen a puntos del centro, a las montañas del sur y el archipiélago balear.
Nevará por encima de unos 1.700 metros y bajarán las temperaturas en buena parte del país, con un descenso "notable" en el Cantábrico, aunque subirán en las zonas donde las nieblas hayan sido persistentes en los días previos, especialmente en la cuenca del Ebro, ha señalado el portavoz de Aemet.
El martes y el miércoles serán "jornadas de tiempo similar", con ambiente estable y tiempo anticiclónico, aunque en el extremo norte peninsular restos de sistemas frontales darán lugar a lluvias en las comunidades cantábricas y en los Pirineos, con nevadas a partir de unos 1.200 a 1.400 metros.
También podrían formarse tormentas en puntos de Cataluña, sobre todo en el norte de esta comunidad y en Baleares, alguna con carácter intenso.
En cuanto a la temperaturas, seguirán bajando acercándose a "valores propios de la época", pero todavía sin un frío excesivo, con diurnas que llegarán a superar los 20 grados en el sur y este peninsular: Málaga y Murcia marcarán 23 grados; Valencia y Sevilla, Alicante y Almería llegarán a 21 grados, y Granada a 20 grados.
En el centro del país, Madrid y Guadalajara se quedarán en 14 grados y en Ávila el termómetro no pasará de 12 grados.
Por la noche, los valores oscilarán entre los 15 grados de mínima de Almería y Málaga, a los 2 grados de Cuenca, Huesca, Palencia y León, entre otras capitales.
En cuanto a la Canarias, predominarán los cielos nubosos con probables precipitaciones en el norte de las islas de mayor relieve, y los cielos poco nubosos en el resto. Sin embargo, no se descarta que las islas sigan bajo la influencia de una dana que, con baja probabilidad, podría dejar lluvias más abundantes en el oeste.
Para el jueves y el viernes, comienzo del puente de diciembre, persistirá una situación similar, con tiempo anticiclónico en casi todo el país, salvo en el norte peninsular y en Baleares, y con bancos de niebla que regresan debido a que los vientos comenzarán a amainar.
Estos días la temperaturas volverán a subir y otra vez podrían rondarse los 20 grados en el Cantábrico y superarse los 22 grados en áreas del sureste, mientras que en la meseta norte es probable que persistan las nieblas durante buena parte del día y el ambiente sea más frío.
A partir del sábado y domingo, es "posible" que comience a llegar aire frío de origen continental, que provocaría un descenso térmico acusado, con nevadas en zonas de montaña y aledañas del extremo norte y también en Baleares, aunque habrá que esperar la evolución.
En cuanto a las Islas Canarias, continuará el tiempo estable, con cielo poco nuboso en general y con temperaturas que tenderán a descender, a normalizarse después de un fin de semana caluroso, ha concluido el portavoz. EFE
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