Toledo, 29 nov (EFE).- El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha rechazado este viernes plantear el 41 Congreso Federal socialista que se celebra este fin de semana en términos "de resistencia" o "entronización", y ha abogado por que haya "crítica y autocrítica" y evitar dar "la imagen de búnker".
"Lo verdaderamente importante es que el secretario general (Pedro Sánchez) haga un informe político, exponga la gestión, rinda cuentas y, a partir de ahí, que se pueda establecer un debate: ya veremos si lo hace", ha asegurado García-Page a los medios antes de inaugurar una escuela infantil en Consuegra (Toledo).
García-Page ha defendido que el Congreso socialista de Sevilla debe dedicarse a "abordar los problemas de la gente", y ha avisado de que "los que estén trabajando para que (el PSOE) se convierta en un búnker inaccesible" se pueden "estar equivocando".
Para el presidente castellanomanchego, lo más importante son los textos aprobados por el Congreso, en sus palabras "el catecismo" del PSOE, que él ha dicho tomarse "muy en serio" aunque "a lo mejor hay a quien no le importa lo que queda escrito" porque luego hace "lo que le da la gana".
En este sentido, ha asegurado García-Page que la ponencia marco elevada al Congreso "mantiene lo esencial del proyecto socialista de toda la vida" y es "muchísimo más digerible y más rebajada" respecto a "la carga de hostilidad que tenía en el pasado".
"Para mí hubiera sido duro ver que la ponencia se plantea en términos de trágala", ha comentado. EFE
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