Vigo, 29 nov (EFE).- El entrenador del Celta, Claudio Giráldez, desconfía de la situación clasificatoria del Espanyol, al que visitan este sábado en Cornellá, donde el técnico del equipo perico, el gallego Manolo González, encara su primera “bola de partido” para salvar su puesto.
“Es imposible saber cómo están ellos dentro del vestuario. Creo que han hecho muchas cosas bien, pero también es verdad que han tenido un calendario muy difícil porque ya han jugado contra todos los de arriba. Tienen una buena manera de trabajar. Desde el año pasado en ese final de temporada en Segunda División con Manolo, el equipo tiene mucha identidad, es reconocible y alegre”, apuntó Giráldez.
El técnico celeste considera que su próximo rival tiene “muchas maneras de hacerte daño”, especialmente “en situaciones de transición y de centro lateral”, por lo que espera un partido de "máxima exigencia" para los suyos.
“Tienen argumentos para poder ganarle a cualquiera, lo han demostrado. Nosotros estamos en una situación clasificatoria mejor, pero las diferencias son mínimas ante cualquier equipo de la categoría”, ahondó en su comparecencia ante los periodistas.
Reconoció el entrenador del Celta que el punto sumado ante el Barcelona ha dado “confianza” a su equipo, que buscará ante el Espanyol su segunda victoria a domicilio en el presente campeonato.
“Es una realidad que necesitamos mejorar fuera de casa”, sostuvo Giráldez, quien celebró la reciente renovación de Hugo Álvarez con el Celta hasta junio de 2028: “El club tiene que pensar en ser cada vez más fuerte en los años venideros, generar algo sostenible que pueda mantener el nivel y mejorarlo, y la aparición de los canteranos es ilusionante para todos”.
Finalmente, el entrenador del Celta afirmó que “lo mejor” del centrocampista Ilaix Moriba con la camiseta celeste “todavía está por llegar”.
“Está haciendo las cosas muy bien y ha evolucionado mucho. Su día a día es un espectáculo, lo que nos aporta a nivel de energía y lo querido que es en el vestuario”, concluyó. EFE
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