Logroño, 29 nov (EFE).- El Logroño visita este sábado Aranda de Duero inmerso en una realidad mucho más difícil de lo esperado, con los equipos de la zona baja muy cerca, con lo que el encuentro es una final para los riojanos ya que si no ganan tendrán más que difícil terminar la primera vuelta cerca de sus objetivos.
El Logroño buscaba al inicio de temporada estar en la dinámica en la que acabó la pasada campaña, es decir, entre los equipos que luchan por estar en puestos europeos.
Pero su falta de capacidad para ganar en casa le ha llevado a estar ahora mismo a seis puntos del tercer puesto y tener más cerca la zona baja, ya que están solo cuatro por encima del último clasificado.
Los errores en su propia pista han llevado al equipo de Logroño a esa situación y el temor ahora es que los nervios pasen factura a unos jugadores que no esperaban esa situación, lo que puede acabar de complicarla.
"Cuando los puntos no llegan estas fastidiado", reconoció a EFE el preparador de los riojanos, Miguel Ángel Velasco, que asume que "con unos pocos fallos menos estaríamos hablando de otra cosa, porque hubiésemos sumado más y estaríamos pensado en los puestos europeos".
Su equipo es el cuarto que más goles ha encajado en toda la Liga Asobal, lo que revela el principal "debe" de su plantilla aunque él pone el acento en que "perdonamos mucho en lanzamientos claros" y "en defensa creo que no hemos estado tan mal" aunque "es cierto que nos han faltado algunas paradas más" y "solo con eso estaríamos mejor".
Esas son las tareas con las que viaja a Aranda, "donde es cierto que estamos ante una final porque "nuestro rival solo está dos puntos por debajo", dijo, y "llega de pasar por encima al Benidorm y en su casa es muy peligroso" con lo que espera un partido "a cara de perro".
En esa situación pide a sus jugadores "no tener nervios" y "apretar los dientes para aceptar que esta es nuestra realidad y hay que amoldarse a ella".
El Logroño cuenta con solo 13 jugadores para el choque, por la lesión del cubano Ángel Rivero, aunque podrá dar minutos a Martí Soler, por primera vez en la temporada, con lo que Xavi Tuá tendrá algún descanso en su puesto. EFE