Arriondas (Asturias), 28 nov (EFE).- El asturiano Nacho Manzano ha asegurado este jueves que "nunca" ha trabajado para conseguir estrellas Michelín y que las tres que ha obtenido este año el restaurante Casa Marcial "han venido".
En una entrevista con EFE, ha afirmado que el reconocimiento obtenido por Casa Marcial, el restaurante familiar emplazado en la aldea de La Salgar, a tres kilómetros de la localidad de Arriondas, supone un "broche de oro" al trabajo de su familia y a la apuesta por ofrecer la esencia de la zona de la sierra del Sueve en la que se encuentra.
"Intentamos meter en la cocina todo lo que ocurre en el exterior", ha señalado el responsable del único restaurante que ha conseguido las tres estrellas de la Guía Michelin en su edición de 2025 de la gastronomía española.
Nacho Manzano, que trabaja junto con sus hermanas Esther, también cocinera, Sandra, jefa de sala, y Olga, en las oficinas, ha asegurado que su "reto ser cada año un poco mejor" y que "donde hay un poco de margen de mejora" es donde buscan "ser más genuinos" para que "la gente venga, se lo pase muy bien, quiera volver y tenga ese recuerdo perdurable en su corazón".
En la pequeña aldea en la que se ubica el restaurante, en la falda del Sueve, los sentidos "se encogen un poco" y por ello convive con la obsesión de que el establecimiento sea una "prolongación" de lo que está pasando fuera.
El restaurante apuesta por los productos de cercanía y por estimular las capacidades sensoriales, que en esta época otoñal lleven al comensal a percibir cómo huele en Asturias un bosque de castaños cuando vas a recoger setas.
"Poder meter eso en la cocina me eriza los pelos", ha dicho Manzano, quien ha enfatizado que en la pequeña aldea donde se encuentra Casa Marcial "el aire corre fresco y nítido".
Para Casa Marcial, donde nacieron los hermanos Manzano, el reconocimiento otorgado por la Guía Michelin es "algo único, impensable hace unos años", ha confesado Nacho sobre el bar tienda de comidas que fue regentado por sus padres y a la que se incorporó como cocinero.
"Se está haciendo justicia porque parecía que solo estaba Nacho Manzano cuando hay una familia volcada y un equipo humano que nos sigue", ha enfatizado el chef, que define Casa Marcial como el proyecto más íntimo y personal de una serie de propuestas gastronómicas gestadas en el tiempo, algunas de ellas en el extranjero.
Tras sus inicios como repostera, su hermana Esther Manzano se ha convertido en una aportación determinante en la cocina para contribuir al éxito del nuevo triestrellato de la Guía Michelin, que según opina ella reconoce "la autenticidad reflejada en los platos, la cocina personal y un paisaje espectacular".
Por su parte, Sandra Manzano tiene una labor "muy bonita" como jefa de sala, algo que le requiere "transmitir al cliente" todo el trabajo que sus hermanos junto al equipo de cocina hacen dentro.
Este jueves en la pequeña aldea de La Salgar la piña familiar vivió un nuevo capítulo, cuando Olga y Marcial, los padres de los hermanos Manzano, llegaron al restaurante para reencontrarse con sus hijos y celebrar juntos la tercera estrella Michelín. EFE
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