Málaga, 28 nov (EFECOM).- El Ayuntamiento de Málaga ha dado luz verde este jueves a la prohibición de nuevas viviendas turísticas en 43 barrios de la ciudad donde superan el 8 % del parque residencial y en otros 328 solo se permitirá la inscripción de aquellos alojamientos que tengan entrada y servicios independientes.
Esto será posible gracias a la aprobación inicial de la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), que permitirá la zonificación de la ciudad y establecer limitaciones por razones de interés general según el índice de viviendas turísticas sobre el número de viviendas familiares en un total de 417 barrios, de los que 46 no son considerados residenciales.
La propuesta -que entra en vigor una vez que se publique en el Boletín Oficial de la Provincia- ha salido adelante con los votos favorables del equipo de gobierno (PP), la abstención de Vox y el rechazo de los grupos municipales del PSOE y Con Málaga (la confluencia de Podemos e IU).
El equipo de gobierno ha desestimado las enmiendas presentadas por PSOE y Con Málaga, encaminadas a medidas más restrictivas como la aplicación de la necesidad de entrada y servicios independientes desde 2011 o de una moratoria de viviendas en el conjunto de la ciudad.
La concejala de Urbanismo, Carmen Casero, ha señalado que el Ayuntamiento seguirá adoptando medidas "serias, sensatas y con respaldo jurídico"; y ha mencionado algunas de las soluciones acordadas en otras ciudades españolas con "problemas similares", como Gijón, Toledo, Vigo, Logroño, San Sebastián, Bilbao o Santiago de Compostela.
El portavoz socialista, Daniel Pérez, ha opinado que la zonificación supone "darle una patada a la lata", pero no resuelve el problema de la vivienda; y ha instado a tomar "medidas valientes y contundentes".
También considera insuficiente la respuesta municipal la portavoz de Con Málaga, Toni Morillas, que ha advertido de que abre la puerta a que haya 12.700 nuevas viviendas turísticas en la ciudad.
El portavoz de Vox, Antonio Alcázar, ha justificado su abstención en que se debe regular la actividad, pero de la propuesta del Ayuntamiento ha dicho que, "a corto plazo, es una medida inútil y a largo plazo contraproducente".
En otros 32, tales como El Palo, Pedregalejo o Huelin, con un índice de viviendas igual a superior al 4,53 %, solo se permitirán nuevas inscripciones hasta alcanzar el 8 %, siempre que dispongan de entrada y servicios independientes.
Se establece una tercera zona formada por 296 barrios con una tasa de viviendas turísticas inferior al 4,53 %, donde se podrán dar de alta aquellos alojamientos que cumplan el requisito de contar con acceso y servicios independientes.
La zonificación parte de un estudio que aporta datos hasta junio de la incidencia de la vivienda de uso turístico (VUT) en los 417 barrios en que se divide la ciudad, atendiendo a las 11.559 de esta tipología inscritas en el Registro de Turismo de Andalucía, de las que 7.035 operaban a través de plataformas.
El pasado junio, el Ayuntamiento estableció un primer freno para el registro de nuevas viviendas de este tipo al exigir que tengan elementos de acceso y evacuación adecuados independientes de los del resto del edificio.
Recientemente, el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre (PP), remitió una carta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la que le pide un marco jurídico que permita establecer un impuesto a las pernoctaciones en viviendas turísticas, que ya cifró en dos o tres euros por persona y día en otra misiva enviada en agosto a Industria y Turismo.
El objetivo es que la recaudación se destine a subvencionar los alquileres de familias con problemas de acceso a una vivienda por su situación económica o social.
En los últimos meses, ha habido dos manifestaciones en la ciudad para pedir soluciones ante las dificultades para acceder a una vivienda debido al encarecimiento de los precios y a favor de la limitación de los pisos turísticos.EFECOM