Juzgado admite a trámite la demanda de Sergio Álvarez por injurias de Teresa Blázquez

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Barbate (Cádiz), 28 nov (EFE).- El Juzgado de Primera Instancia de Barbate (Cádiz) ha admitido a trámite la demanda interpuesta por el jinete de saltos internacional Sergio Álvarez Moya por injurias y calumnias de Teresa Blázquez, amazona y directora del complejo hípico Dehesa Montenmedio, y ha señalado el acto de conciliación para el próximo 13 de diciembre.

Según la denuncia de Álvarez Moya, a la que ha tenido accedo EFE, durante la celebración del 'Stephex Master' de Bruselas a finales de agosto pasado, Blázquez "remitió un escrito" a distintas autoridades "relatando una serie de hechos que son absolutamente inciertos" y que, en su opinión, "atentan contra su reputación y buen nombre".

Además, la denunciada habría compartido el documento con las federaciones española e internacional de hípica, así como "multitud de personas relacionadas" con este deporte "con el fin de difamar y dañar" la reputación del jinete asturiano "lo máximo posible".

La amazona andaluza acusó al jinete asturiano de gritarle "en actitud agresiva" durante su calentamiento en la pista de ensayo y, según la denuncia, aseguró a los comisarios de la Federación Ecuestre Internacional (FEI) que se alejó "aterrada" de Álvarez Moya, de quien teme "sus violentas reacciones, ya que tiene antecedentes de agresiones" a otros competidores.

La denuncia asegura que tanto el entrenador haitiano Farid Ladjouan, que se encontraba en la pista de ensayo, como el árbitro belga Jeff Nauwelaerts, jefe de comisarios del Stephex Master de Bruselas, han remitido "sendos escritos a la FEI" en los que "desmintieron rotundamente los hechos expuestos" por Teresa Blázquez.

De este modo, Sergio Álvarez Moya solicita que la denunciada se retracte de sus afirmaciones mediante un escrito en el que admite que los hechos relatados en su carta del 29 de agosto no son ciertos y retire las acusaciones contra el jinete asturiano, quien carece de antecedente alguno por agresión o acoso y que jamás ha "mantenido ninguna conducta intimidatoria hacia su persona". EFE

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